"Soraya luchaba para tener casa con su hijo pero todo se truncó"
Familiares y vecinos recordaron a Soraya Pamela Sepúlveda, víctima de un cruel femicidio al interior de Galería Caracol. Señalaron que el hombre que le quitó la vida la buscaba constantemente en el domicilio de sus padres.
Con globos y flores, los vecinos de la población El Jazmín de Penco, esperaron la llegada de Soraya Pamela Sepúlveda Riquelme (29) para velarla en la casa de sus padres. El llanto y el desconsuelo de sus familiares y amigos daba cuenta del enorme daño que ocasionó a todos sus seres queridos el cruel femicidio del que fue víctima, mientras trabajaba en la Galería Caracol de Concepción.
Durante el difícil momento que enfrentan como familia, Claudia, hermana de la joven, intentó conversar con La Estrella pero las lágrimas no le permitieron hablar. Sin embargo, quien la acompañaba, Ingrid Ailon, comadre de la mamá de la víctima, la recordó como "una mujer esforzada y trabajadora, que luchaba por tener una casa con su hijo pero todo se truncó".
Afirmó que "ella estaba desde hace casi dos años en el salón, desde que se separó. Mientras tanto su papá, que es carpintero, le construía una casita al lado de la suya. Eso buscaba ella, estar tranquila, ayudar con los materiales e ir avanzando. Pero ahí quedó todo, a medio construir".
Sujeto la buscaba
Según indicó Ingrid, Soraya le había contado a la familia los problemas que había tenido con su ex pareja, Luis Alberto Gutiérrez Salgado, de 68 años, quien fue el hombre que la asesinó dentro del salón de "Bella Imagen". Agregó que "él la celaba mucho. Tenían harta diferencia de edad. Se habían conocido en un trabajo anterior. Después que se separaron y ella se vino a vivir a Penco, de vuelta con sus papás, este hombre la siguió y se fue a vivir a Punta de Parra (Tomé) e insistía en que se fuera a vivir con él. Pero ella había cortado toda relación, no quería saber nada de él. Pero él la acosaba mucho, venía a la casa a armar problemas".
Vecinas la recuerdan
Alrededor de las 16.30 horas, el cuerpo de la querida trabajadora del Edificio Caracol arribó a su barrio de toda la vida, luego de que fuera entregada a la familia por parte del Servicio Médico Legal de Concepción.
En medio del triste momento, los más cercanos a los padres y hermana de la joven estuvieron apoyándolos. Según expresaron los presentes, nadie imaginó que la niña que vieron crecer y estudiar en Penco fallecería de forma tan trágica.
María Daza, vecina del sector, contó que "ella era una persona muy tranquila y apegada a sus padres, además de ser una mamá cariñosa. Soraya fue muy amiga de mis hijas y compartía harto con nosotros. Lo que ocurrió es algo inesperado y muy doloroso para todos".
"Era una vecina muy buena. La conozco desde que era una guagua. No entiendo lo que pasó, ni conocía los problemas que tenía. La recordaré siempre como una niñita que veía pasar por el cerro. Me afecta mucho ver el dolor de su padre y su madre ahora, no los quiero ver sufrir ya que son como hijos para mí", expresó María González.
Cabe señalar que el velatorio de la joven asesinada se realizará también durante la jornada de hoy en el domicilio de sus padres, ubicado en las cercanías de calle San Luis, atrás del cementerio de Penco. Según se indicó a La Estrella, el funeral se realizará mañana en un horario que será confirmado por la familia a los seres queridos de Soraya.
"Ella había cortado toda relación. No quería saber nada de él. Pero él la acosaba mucho".
Ingrid Ailón,, cercana a la familia"