Héroes relataron cómo fue su ayuda en drama del Sanatorio
Algunos cumplían funciones y otros colaboraron de forma voluntaria. Ellos representan a muchos otros que desinteresadamente sumaron voluntades.
El sábado pasado, cuando aún estaba en su casa camino a Santa Juana, el cirujano dentista Edgardo Caba sintió un fuerte estruendo que estremeció las ventanas de su vivienda. "La onda expansiva llegó hasta allá, se movieron mucho las ventanas", señala.
"La gente que no estaba de turno empezó a llegar espontáneamente cuando se supo la noticia, eso me impresionó", cuenta el especialista, ya de vuelta a la rutina normal en el Cesfam Pedro de Valdivia, donde además se desempeña como director subrogante.
"A través de redes sociales fuimos sabiendo más", dijo, añadiendo que "son muy importantes las comunicaciones y esta vez funcionaron muy bien, se supo inmediatamente lo que había pasado, porque no hubo corte de suministro eléctrico".
La llegada de pacientes con cortes o traumas acústicos al Cesfam requería de coordinación con las atenciones agendadas de antemano que se hacían en el lugar.
En esa labor fue clave el técnico superior en enfermería (Tens) Cristian Sepúlveda, que tomó rumbo al centro de Salud cuando supo lo que había ocurrido.
"Apenas escuchamos la noticia me vine para acá, fue muy similar a lo del terremoto, porque nos coordinamos rápidamente", cuenta Sepúlveda, que también oyó el estruendo, pese a que estaba en su casa, en Hualpén.
En ese momento había que coordinar y abrir fichas provisorias para los atendidos y Cristian es el que más conoce el sistema de fichas y archivos del recinto. "Hubo que evaluar rápidamente a las personas para poder atenderlas".
"Llegaron pacientes muy desorientados, aún sin saber bien qué era lo que había ocurrido", relató el tens, mientras que Caba destacó que también se sumaron equipos de profesionales de otros centros de salud familiar, como los de Lorenzo Arenas y Pedro del Río Zañartu, "eso habla del compromiso de estos profesionales con los pacientes, sin importar las circunstancias".
Deber ante todo
Al momento de la explosión, cuatro carabineros estaban en el Sanatorio Alemán como parte de las rondas preventivas, cuando supieron de la evacuación.
Todos ellos se quedaron evacuando a más gente del lugar, sin importar que ellos mismos estaban con daño acústico y, en el caso del sargento segundo José Riquelme, con un corte en la cabeza.
"Se trabajó en conjunto, hubo cohesión y se evacuó el Sanatorio. Pudimos sacar a los heridos", recuerda el sargento Riquelme, quien ayudó a una madre y su pequeño hijo a salir del recinto médico.
La sargento segundo Solange Ortiz afirma que "es gratificante ayudar a los demás, para eso uno entra a la institución. En situaciones así, se nota que Chile siempre se une y se levanta".
"Cualquier carabinero de Chile, si hubiese estado, habría hecho lo mismo", asegura el carabinero Pablo Llanos, y la sargento Ortiz asiente: "Estoy orgullosa de ser carabinera y vestir el uniforme. Ésa es la labor que cumplimos día a día".
Desde el puerto
Atendiendo el llamado generado producto de la emergencia, el enfermero reanimador Yodi Muñoz, del Samu Servicio de Salud de Talcahuano, concurrió en ambulancia hasta el Sanatorio Alemán.
"Llegamos y la gente todavía estaba un poco desorientada por el impacto, pero todos fueron muy profesionales y rápidamente se organizaron las labores", cuenta Muñoz, quien llegó hasta el recinto con otros dos compañeros.
Relata que hubo un trabajo coordinado con los otros equipos, "luego de priorizar a los pacientes comenzamos los traslados. Creo que es una de las situaciones más impactantes que he vivido".
"Hay que destacar al personal paramédico, que pese a todo, no dejaron a sus pacientes"
Solange Ortiz,, sargento 2º de Carabineros"
65 pacientes fueron trasladados a otros desde el Sanatorio a otroscentros asistenciales.