Amada Contreras Cáceres
Por años la vida en la ciudad ha sido sinónimo de oportunidades, pero no sólo para los humanos: alejada de su hábitat natural, las gaviotas se establecieron también en el centro penquista, causando preocupación entre residentes y comerciantes por el notorio aumento de ejemplares en los techos.
Andrea Barriga, quien es vecina del centro de Concepción, expresó que "el ruido que hacen es constante, en mi jardín caen pichones todo el tiempo, también los huevos, lamentablemente".
"Durante la mañana ensucian el balcón, pero la gran parte del día las veo en el techo de Tribunales", añadió a su vez Ana Sanhueza, que vive en un céntrico departamento.
Una de las construcciones afectadas por la presencia de estas aves es la Catedral de Concepción. Su estructura amplia y con forma irregular asoma ideal para los nidos de los pájaros, entre ellos las gaviotas.
Leonardo Durán, sacristán suplente, comentó que "constantemente contratamos personas que vengan a reparar el techo y limpiarlo. Las canaletas se obstruyen por la suciedad".
Según estudios que maneja la Seremi de Salud, la principal enfermedad que podrían traer consigo las gaviotas es la salmonella. Sin embargo, no hay cifras que revelen que estas aves puedan aumentar el número de contagios.
Razones
Según los especialistas, la invasión de los acantilados ha provocado que las gaviotas se adapten a un nuevo modo de vida en la ciudad, dejando la costumbre de buscar alimento en el mar y encontrando su comida en los basureros.
"En el centro de Concepción obtienen más fácilmente alimento y se sienten más seguras haciendo nidos en los techos", sostuvo Miguel Ángel Mansilla, veterinario de la USS.
"Esta situación no sólo es de esta región, sino que ocurre en muchas ciudades de todo el mundo que están cerca del mar, como Londres, Roma o Buenos Aires", agregó.
Opciones
La gaviota dominicana es la especie más grande que se encuentra presente en toda América. Su personalidad oportunista hace posible que pueda acostumbrarse a los humanos, lo que explica su traslado de la costa de Talcahuano y alrededores hacia Concepción.
Así lo comentó Patricio Ortiz, ornitólogo que trabaja en el Comité Pro-Defensa de la Flora y Fauna (Codeff) como coordinador nacional del programa "Important Bird and Biodiversity Areas", quien explicó que pueden haber métodos para mejorar el escenario que se vive en Concepción, respetando las leyes que protegen esta ave.
"Una de las opciones sería hacer un estudio de la arquitectura de los edificios, de tal forma que las gaviotas no la vean como una posibilidad de hacer nidos. También la limpieza podría ayudar", indicó.
Agregó que la dieta que llevan estos pájaros en su ambiente natural es de peces y crustáceos, lo que en la ciudad cambia a desperdicios por ser omnívoros.
Hay países que han optado por hacer construcciones artificiales que se conviertan en hogares seguros para aves, que no afecten a las personas ni ponga en peligros a los animales.
"La solución más complicada sería que la gente respetara las zonas en las que viven", afirmó el experto, añadiendo que no hay que olvidar que los derrames de petróleo y enfermedades por la basura son otros peligros para la especie. Cualquier medida extra de contención debe ser autorizada por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
"Hacen sus nidos y traen lo que agarran para comer. Son animales hambrientos"
Leonardo Durán"