Juan Pablo Fariña López
Un violento asalto se produjo cerca de la medianoche del jueves en la schopería y restaurante "Pao-Pei" de Talcahuano. Allí, el dueño defendió con un arma de fuego al público y a su esposa, que atendía la caja, de dos presuntos delincuentes que estaban con un bate, baleando a uno de ellos en el tórax y, por accidente, a un cliente en su hombro derecho, quedando ambos con lesiones graves sin riesgo vital.
Sobre cómo ocurrieron los hechos, el teniente Jonathan Venegas, del Labocar de Carabineros, indicó que "una pareja de individuos procede a intimidar a una de la locatarias para que efectuara entrega del dinero, ante lo cual el regente del local, para repeler el asalto, procede a sacar un revólver y efectuó dos disparos, uno de los cuales lesionó a uno de los asaltantes y el segundo a un cliente, que se hallaba consumiendo alimento al interior del recinto".
Arma ilegal
Tras reducir a los antisociales y retenerlos en el local hasta la llegada de Carabineros, el propietario del establecimiento también fue detenido. Si bien se acreditó la legítima defensa a terceros, el arma que utilizó, una Taurus calibre 38, no estaba inscrita a su nombre, incurriendo en el delito de tenencia ilegal de arma de fuego, por lo que pasó la noche privado de libertad.
Durante la jornada de ayer se le formalizó por este ilícito en el Juzgado de Garantía de Talcahuano, donde se estableció su libertad con la medida cautelar de firma mensual en la Segunda Comisaría de Carabineros del puerto hasta que finalice la investigación.
Respecto a este delito, el fiscal Paulo Pucheu señaló que "se entiende su accionar en el marco de una legítima defensa a terceros y sin la intención de ocasionarle daño al cliente. Esta arma no estaba inscrita de forma regular y la usó para proteger a su cónyuge y el resto de los asistentes al local".
En tanto, el dueño de la schopería manifestó a la salida del juzgado que "estaba descansando en mi dormitorio y cuando amenazaron e intentaron atacar a mi esposa salí a defenderla a ella, clientes y otros trabajadores. Hubo un forcejeo y con el arma herí a un ladrón. Después me golpearon y al caer al suelo intenté darle un tiro en el pie a uno, pero le llegó al cliente. Lamentablemente cometí el error de no inscribir el arma y nunca tuve la intención de disparar, sólo quería intimidar a los tipos que entraron para asaltarnos".
Los acusados
Los dos acusados por el asalto a la schopería, un hombre de 32 años, que recibió el impacto de bala, y una menor de 17, fueron formalizados por robo con intimidación. Cómo medida cautelar se determinó que el mayor de edad quedara con prisión preventiva y la menor con internación provisoria en régimen cerrado.
38 es el calibre del revolver Taurus que utilizó el dueño de la schopería para repeler el asalto.