Alfonso Levet G.
Dando el paseo para las fotografías de rigor tras la bendición de su matrimonio, Griselda Suazo y Miguel Berna estaban totalmente ajenos a lo que ocurría en los distintos locales de votación de Lota.
Y es que no sólo eligieron el poco común domingo, sino que además coincidió con la jornada de la segunda vuelta presidencial en todo Chile.
"Justo el día de las elecciones se nos ocurrió casarnos", dijo la novia, mientras pasaba a saludar a unos conocidos en un negocio de Lota Alto.
Los autos y la locomoción colectiva que pasaba por la calle Carlos Cousiño tocaban la bocina para saludar a los novios, que además recibieron el cariñoso saludo de los transeúntes, que aún sin conocerlos los felicitaban por la decisión tomada.
Miguel Berna explicó simplemente que "éste era el momento, había que hacerlo", acerca del día que eligieron para casarse por la iglesia.
"Lo habíamos planificado desde antes, así que nunca pensamos en cambiar la fecha", indicó feliz el hombre.
Votaron temprano
"Sabíamos que eran las elecciones pero la verdad es que no nos hicimos problema", contó Griselda, abrazada de su marido.
Apurados por llegar a la fiesta, se subieron rápidamente al auto adornado para ir a juntarse con sus seres queridos.
"Nos deben estar esperando", le decía el novio, mientras se tomaban una foto, pero consultados por las elecciones que se desarrollaban, la novia explicó que "los invitados fueron primero a votar, bien temprano; ahora nos están esperando para celebrar el matrimonio".