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Coti Donoso, montajista: "Soy feliz haciendo esto"

La penquista recopiló información del montaje en documentales, un texto único en el país y también en el mundo.
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Karen Loreto Retamal

Su currículum es extenso: Nuestro Siglo, Ovni, Un Día, Apasionados, El Mirador, Entre Mundos, documentales de la Cultura Entretenida, entre otros; así como en producciones de autor como Cuántos millones de años (de Ignacio Agüero), Testigos del Silencio (de Mario Kreutzberger), y La Mudanza (de Tati Lorca), entre otros. Así como directora de largometrajes documentales tales como Cuando Respiro y Un siglo por Chile.

En estos 20 años de carrera, Coti Donoso, sicóloga y montajista ha cimentado un estilo y característica que la han hecho única. Ha abarcado cada área de los documentales, siendo el montaje algo que la apasiona y la motiva a full. Es que componer una escena y que esta tenga una secuencia es lo más importante. Eso es lo que recabó en su libro "El otro montaje", el primer texto de su tipo, hecho por una mujer.

En Chile no hay una publicación como la de ella. "Es el primero que se hace del montaje de documental, no se ha escrito nada en el país.

"Cuando comencé a hacer clases, investigaba, pero nadie sabía cómo enseñar. No había precedentes, no había profesores de montaje documental. Ahí me puse a leer y leer, y lo único que encontré en el mundo entero era un texto de una francesa en un coloquio en Colombia. Eran 20 páginas. Luego encontré otro artículo de ella... otros párrafos en diversos lados. Pero todo era siempre de montaje cinematográfico".

Luego, con todos sus anotaciones, sintió que debía hacerlo libro para que quedara un respaldo. Postuló a fondos, que ganó, y se consolidó el proyecto. Armó un grupo de investigación con sus alumnos de la Universidad de Chile.

El libro tiene más de 300 páginas, con muchos escritos reflexivos, entrevistas y diversos documentos.

Full dedicación

"Soy penquista, pero me fui hace muchos años. Estudié Sicología en la Universidad de Concepción, soy de la primera generación egresada. Viví en Conce hasta los 23 años y luego me fui a cumplir mi sueño de estudiar cine en Santiago. Era complicado estudiar este tipo de carreras. Decidí terminar una, trabajar de sicóloga mientras estudiaba la otra, que era Comunicación Audiovisual en el Instituto Arcos, eso fue el año 1991", relata.

Estudiando, nunca pensó que se iba a dedicar a ser montajista. Siempre le gustó el montaje cinematográfico, pero haciendo una práctica, en tercer año, en la emblemática productora Nueva Imagen, que hacía los programas más entretenidos de TVN. "Mi sueño era estar ahí, logré entrar. Dentro, me dijeron que hiciera hacer montaje, pero no sabía. O sea sabía la teoría, pero no la práctica. Hacer montaje documental es muy difícil, pero me tiré a la piscina", cuenta.

Desde ahí empezó a hacerlo. "Había muy poca gente que lo hacía. Es más, los directores hacían los montajes de sus películas. Fue algo fortuito, se fue dando. Desde ahí, desde 1996, que trabajo en esto", dice.

Se ha dedicado al montaje de documentales, entre medio, señala, también con ficción, trabajando en diferentes productoras, pero no le gustó, "me aburría", confiesa, prefiriendo siempre lo real que se experimenta con el documental.

Es que, como explica, entre éstas hay grandes diferencias: con una de ficción se realiza un guión y se establece una dramaturgia, personajes y una historia. El rodaje y montaje se realiza en base a éste. Sin embargo, en documental, se hace un "guión imaginario", que es una guía para no perderse en el rodaje, "pero grabando, como estás trabajando con lo real, te abre, te abre…no cierra. Eso significa que llegas con 100 horas de material para una película de una hora y 10. Eso es lo interesante, porque dices: ¿Qué hago con estas 100 horas? Ahí empieza la odisea, la creatividad, la experimentación y muchas cosas empiezan a suceder. Eso habla el libro, de qué pasa en ese momento", añade.

Lleva años, pero para Coti cada cinta es un desafío distinto, ya que todas tienen un método y mirada distinta: "Eso es lo choro en el montaje, que tienes que buscarle todo, porque no viene predeterminado", aporta.

"No podría hacer otra cosa en la vida. Soy feliz haciendo esto".

"Cuando comencé a hacer clases, investigaba, pero nadie sabía cómo enseñar. No había precedentes, no había profesores de montaje documental"

Coti Donoso"

columna

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Jeannette Fuentes


Las oportunidades que entrega la Educación Online

Muchas veces cuando estamos insertos laboralmente, se hace necesario seguir actualizando conocimientos relacionados con nuestras áreas de trabajo, es por ello, que una forma de distribuir nuestros tiempos entre la familia, trabajo y estudio, es optar por una carrera que se dicte en modalidad online o semipresencial. Por otro lado, existen personas que no están permanentemente en un solo lugar y este modo permite estudiar a distancia.

Algunas de las ventajas son que resulta cómodo estudiar desde la casa, se ahorra dinero de traslado, tiene horario flexible, es inmediato y se adapta a las necesidades de cada uno. Otros aspectos a considerar, son los costos asociados, ya que estudiar presencialmente significa invertir mayor tiempo (traslados) y mayores valores de carreras.

No obstante, es importante recalcar, que aquella persona que ingresa a estudiar en esta modalidad debe poseer un nivel de planificación y organización frente a los requerimientos del programa. También, debe poseer capacidades como responsabilidad y proactividad, las cuales son indudablemente relevantes.

En general, toda persona que realmente asuma un compromiso consigo misma, puede estudiar en línea. Solo debe tener los objetivos claros, ser responsable, tener capacidad de autogestión, autodisciplina, organización y presentar aspiraciones laborales y personales.

Coti Donoso, montajista: "Soy feliz haciendo esto"

La penquista recopiló información del montaje en documentales, un texto único en el país y también en el mundo.
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Karen Loreto Retamal

Su currículum es extenso: Nuestro Siglo, Ovni, Un Día, Apasionados, El Mirador, Entre Mundos, documentales de la Cultura Entretenida, entre otros; así como en producciones de autor como Cuántos millones de años (de Ignacio Agüero), Testigos del Silencio (de Mario Kreutzberger), y La Mudanza (de Tati Lorca), entre otros. Así como directora de largometrajes documentales tales como Cuando Respiro y Un siglo por Chile.

En estos 20 años de carrera, Coti Donoso, sicóloga y montajista ha cimentado un estilo y característica que la han hecho única. Ha abarcado cada área de los documentales, siendo el montaje algo que la apasiona y la motiva a full. Es que componer una escena y que esta tenga una secuencia es lo más importante. Eso es lo que recabó en su libro "El otro montaje", el primer texto de su tipo, hecho por una mujer.

En Chile no hay una publicación como la de ella. "Es el primero que se hace del montaje de documental, no se ha escrito nada en el país.

"Cuando comencé a hacer clases, investigaba, pero nadie sabía cómo enseñar. No había precedentes, no había profesores de montaje documental. Ahí me puse a leer y leer, y lo único que encontré en el mundo entero era un texto de una francesa en un coloquio en Colombia. Eran 20 páginas. Luego encontré otro artículo de ella... otros párrafos en diversos lados. Pero todo era siempre de montaje cinematográfico".

Luego, con todos sus anotaciones, sintió que debía hacerlo libro para que quedara un respaldo. Postuló a fondos, que ganó, y se consolidó el proyecto. Armó un grupo de investigación con sus alumnos de la Universidad de Chile.

El libro tiene más de 300 páginas, con muchos escritos reflexivos, entrevistas y diversos documentos.

Full dedicación

"Soy penquista, pero me fui hace muchos años. Estudié Sicología en la Universidad de Concepción, soy de la primera generación egresada. Viví en Conce hasta los 23 años y luego me fui a cumplir mi sueño de estudiar cine en Santiago. Era complicado estudiar este tipo de carreras. Decidí terminar una, trabajar de sicóloga mientras estudiaba la otra, que era Comunicación Audiovisual en el Instituto Arcos, eso fue el año 1991", relata.

Estudiando, nunca pensó que se iba a dedicar a ser montajista. Siempre le gustó el montaje cinematográfico, pero haciendo una práctica, en tercer año, en la emblemática productora Nueva Imagen, que hacía los programas más entretenidos de TVN. "Mi sueño era estar ahí, logré entrar. Dentro, me dijeron que hiciera hacer montaje, pero no sabía. O sea sabía la teoría, pero no la práctica. Hacer montaje documental es muy difícil, pero me tiré a la piscina", cuenta.

Desde ahí empezó a hacerlo. "Había muy poca gente que lo hacía. Es más, los directores hacían los montajes de sus películas. Fue algo fortuito, se fue dando. Desde ahí, desde 1996, que trabajo en esto", dice.

Se ha dedicado al montaje de documentales, entre medio, señala, también con ficción, trabajando en diferentes productoras, pero no le gustó, "me aburría", confiesa, prefiriendo siempre lo real que se experimenta con el documental.

Es que, como explica, entre éstas hay grandes diferencias: con una de ficción se realiza un guión y se establece una dramaturgia, personajes y una historia. El rodaje y montaje se realiza en base a éste. Sin embargo, en documental, se hace un "guión imaginario", que es una guía para no perderse en el rodaje, "pero grabando, como estás trabajando con lo real, te abre, te abre…no cierra. Eso significa que llegas con 100 horas de material para una película de una hora y 10. Eso es lo interesante, porque dices: ¿Qué hago con estas 100 horas? Ahí empieza la odisea, la creatividad, la experimentación y muchas cosas empiezan a suceder. Eso habla el libro, de qué pasa en ese momento", añade.

Lleva años, pero para Coti cada cinta es un desafío distinto, ya que todas tienen un método y mirada distinta: "Eso es lo choro en el montaje, que tienes que buscarle todo, porque no viene predeterminado", aporta.

"No podría hacer otra cosa en la vida. Soy feliz haciendo esto".

"Cuando comencé a hacer clases, investigaba, pero nadie sabía cómo enseñar. No había precedentes, no había profesores de montaje documental"

Coti Donoso"

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Jeannette Fuentes


Las oportunidades que entrega la Educación Online

Muchas veces cuando estamos insertos laboralmente, se hace necesario seguir actualizando conocimientos relacionados con nuestras áreas de trabajo, es por ello, que una forma de distribuir nuestros tiempos entre la familia, trabajo y estudio, es optar por una carrera que se dicte en modalidad online o semipresencial. Por otro lado, existen personas que no están permanentemente en un solo lugar y este modo permite estudiar a distancia.

Algunas de las ventajas son que resulta cómodo estudiar desde la casa, se ahorra dinero de traslado, tiene horario flexible, es inmediato y se adapta a las necesidades de cada uno. Otros aspectos a considerar, son los costos asociados, ya que estudiar presencialmente significa invertir mayor tiempo (traslados) y mayores valores de carreras.

No obstante, es importante recalcar, que aquella persona que ingresa a estudiar en esta modalidad debe poseer un nivel de planificación y organización frente a los requerimientos del programa. También, debe poseer capacidades como responsabilidad y proactividad, las cuales son indudablemente relevantes.

En general, toda persona que realmente asuma un compromiso consigo misma, puede estudiar en línea. Solo debe tener los objetivos claros, ser responsable, tener capacidad de autogestión, autodisciplina, organización y presentar aspiraciones laborales y personales.