Hasta hace unas semanas los amantes del fútbol estaban muy ocupados y preocupados por el incierto futuro de Alexis Sánchez, por su rendimiento inusual en la selección y la gran inquietud de estos fanáticos era averiguar qué escuadra se quedaría finalmente con los servicios del tocopillano.

Nuevos integrantes de este excelso grupo de asiduos al tablón, pensaban acerca de cuáles serían las selecciones con las que nos tocaría jugar en el Mundial de Rusia.

Lamentablemente pocos o me atrevería a decir ninguno, se acuerdan y otros ni siquiera conocen que sí hay un grupo de estrellas y que sí han logrado objetivos mundiales, dejando muy bien puesto el nombre de nuestro país en una instancia deportiva, la gran mayoría ni siquiera tuvieron la oportunidad de una educación completa, de una alimentación adecuada y de usar implementos deportivos mínimos.

Mi homenaje para aquellos casi incógnitos campeones del Fútbol Calle, para estos chilenos que tuvieron fe en una aventura con un final feliz, pero fundamentalmente, para estos compatriotas que supieron atesorar y vivir a fuego intenso el vestir la tricota de su país y que sintieron la vergüenza deportiva cuando las metas les eran esquivas.

De estos futbolistas podrían aprender los hoy consagrados que intentan clasificar a un mundial; de estos deportistas tan precarios podrían darse un baño de humildad nuestras estrellas del profesionalismo.

Concepción

Talcahuano

Tomé

Cañete

Arauco

Curanilahue

Lebu