Hombre murió tras recibir un disparo en Candelaria
Horas antes, familia relató ataque a auto en que viajaban con 3 niñas. Violencia tiene aterrados a los vecinos.
Un hombre de 33 años murió anoche víctima de un tiroteo registrado, en la Villa Padre Hurtado de Candelaria. El crimen se registró a menos de 24 horas de una balacera en la que una familia del sector asegura haber sido atacada en su auto, con tres menores de edad a bordo, por error. Ambos hechos de violencia tienen impactados a los vecinos, quienes piden poner freno urgente a estas situaciones.
De acuerdo a los antecedentes policiales, la víctima de la balacera ocurrida anoche fue identificada como Benjamín Ortiz Merino. El comisario Álvaro Vásquez Araneda, de asuntos públicos de la PDI penquista, confirmó que el fiscal de turno solicitó la concurrencia de la Brigada de Homicidios (BH) al consultorio de Candelaria, por el homicidio por arma de fuego.
Tras el análisis al cuerpo de la víctima, los detectives de la BH trabajaron en el sitio del suceso, levantando evidencias en la vía pública bajo un fuerte resguardo de Fuerzas Especiales de Carabineros. Vecinos del sector y cercanos al fallecido observaron las diligencias policiales, lamentando lo ocurrido.
Disparan a auto
Horas antes, un automóvil que transitaba por el mismo sector sampedrino, y en el que viajaba una pareja junto a sus dos pequeñas niñas y una sobrina, también menor de edad, resultó con cuatro impactos de proyectil. "Nos salvamos de milagro, nos confundieron con alguien más y quedamos atrapados en un tiroteo", relató el conductor, quien pidió el anonimato, añadiendo que lo ocurrido lo obligará a irse de la comuna, aterrado por los continuos enfrentamientos armados.
"Veníamos desde un asado, de regreso a casa. Llegando al terminal de la línea San Remo, vi a tres tipos muy sospechosos. Al doblar a la derecha nos comenzaron a disparar. Las balas le dieron al parabrisas trasero, atrás iban mis dos hijas. Ellas y mi sobrina se tiraron al suelo. Los impactos quedaron en el techo", relató el padre de familia, quien se desempeña como conserje.
Después del ataque, el hombre pidió ayuda a un vecino conductor de micros, quien le prestó cobertura con su máquina, para poder seguir avanzando entre los disparos.
"Sentí miedo por mis hijas. Ellas son chicas, de diez y tres años. La más pequeña después, en la noche, me decía: 'Papá, agáchate que vienen las balas'. Me da pena, impotencia y ya con esto buscaré arrendar casa en otro lado, porque aquí en Candelaria no se puede vivir. De hecho me da miedo contar esto, por si deciden hacernos algo. Necesitamos ayuda, que me ayuden a proteger a mi familia", sostuvo el afectado.
El trabajador explicó que "es triste tener que irme de mi casa por temor, gastar dinero que ni siquiera tengo en otra parte, por culpa de la delincuencia".
Piden fin a balaceras
Orlando Saldías, presidente de la Unión Comunal de Vecinos de San Pedro de la Paz y residente de Candelaria, contó que "escuchamos los balazos. Fue algo de locos, con pistolas automáticas porque eran ráfagas. Empezaron cerca del río, luego hacia Las Torres. Fueron más de 50 tiros, mínimo".
El dirigente hizo un llamado, en representación de los vecinos de Candelaria, al señalar que "hay que hacer algo, sentimos que las autoridades están amarradas, con una ley muy permisiva para los delincuentes. Pero acá se les pueden quitar las armas, hay que hacer allanamientos, intervenciones completas con Carabineros y la PDI, en los lugares en donde tienen pistolas y surgen las balaceras".
33 años de edad tenía la víctima de la balacera registrada anoche en el sector sampedrino.