Lotino cuenta comó agarró histórica pelota
Balón del duelo en que Alexis pasó a ser máximo goleador de la Roja llegó a sus manos. Premio a su pique por Europa.
Cuarenta mil personas, siete mil chilenos presentes en el Kazán Arena, y justo tenía que llegar la pelota a las manos de un hincha de Lota Schwager. Si eso no es suerte, quizás qué nombre tendrá que buscar el afortunado Luis Paz, o "Luis Peace", como es conocido entre sus amigos, para recordar ese imborrable momento, cuando estiró sus manos para agarrar y embolsarse la "Krasava", el balón oficial de la Copa Confederaciones 2017, uno de los que ayer rodó en el empate 1-1 entre Chile y Alemania, por la segunda fecha del Grupo B.
Un balón que tiene más valor aún, pues fue el mismo con que se jugó el duelo en que Alexis Sánchez pasó a la historia al convertirse en el máximo goleador de la selección chilena de todos los tiempos.
"Justo tuve la fortuna de que cuando la pelota saltó afuera, me cayó a mí. Mira la mansa suerte, entre 40 mil personas y que me llegue la pelota", contó a la salida del estadio en Kazán, feliz con su trofeo en las manos, y también con el punto alcanzado por la Roja ante los actuales campeones del mundo.
"El estadio estaba espectacular, mucho chileno, parecía que uno estaba en el Nacional en Santiago, cantando y gritando por Chile, fue espectacular", parló desde Rusia con La Estrella quien se instaló en Kazán con la tricolor de Lota Schwager, con el 11 en la espalda del goleador histórico minero, Patricio Morales. "Usar esta camiseta es un homenaje a él", comentó en su Facebook hace unos días.
A dedo por europa
Ese momento en que a sus manos llegó la pelota lo atesorará para siempre este hincha de La Lamparita, lo que de paso se convirtió en un merecido premio para a su aperrada aventura, pues sus ganas de querer estar en la Copa Confederaciones es una jugada que de seguro pocos se atreverían a realizar.
"Salí de Coronel el 29 de mayo, y me puse a viajar a dedo desde Londres en Inglaterra hasta Moscú", reveló Luis, quien en ese trayecto aprovechó de recorrer varias ciudades del Viejo Continente, entre ellas Amsterdam y Eindhoven en Países Bajos; Kaunas y Vilna en Lituania; Riga en Letonia, hasta llegar a la capital rusa.
Y de ahí a Kazán, para estar ayer alentando a la Roja. "Como la FIFA dispuso trenes gratis para los hinchas que tienen entradas, me vine en tren a Kazán. Casi 15 horas de viaje para ver el partido, pero valió la pena", repasó el ahora feliz hincha, orgulloso de pasear por el mundo los colores de su querido equipo. "Acá feliz, llevando a Lota Schwager por el mundo", destacó Luis Paz.