Gonzalo Cifuentes Uribe
"Yo no quiero que me regalen nada, sólo quiero encontrar trabajo para salir de esta situación". Eso es lo que espera Cristian Pérez, hualpenino de 42 años de edad que vive en un auto.
Hace más de un año que calle Budapest, en la población El Triángulo, se transformó en su domicilio, puesto que ahí estacionó su vehículo, un Fiat Fiorino. "No me quedó opción que venirme aquí, porque no tenía otro lugar", manifestó.
Los días son difíciles para Carlos. "Me baño donde algún vecino por acá y como donde me pille el día. Lo ideal es comer en algún lugar donde tenga una peguita, pero no siempre es así", manifestó.
En estos momentos, lo que más le importa es recuperar a su familia. "Tengo tres hijos, a quienes perdí hace unos años. Mi hija mayor ya es profesional, pero los otros no me pescan mucho", dijo.
Es por ello que necesita un trabajo. "Yo soy un maestro chasquilla, sé hacer de todo. En una maestranza quedaría bien", señaló "El Maná", como lo conocen en el barrio.
"Para mí lo ideal es algo aquí en la zona, porque mi anhelo es recuperar a mis hijos. Me gustaría invitarlos a mi casa, a tomar once. Recuperar el tiempo perdido", sostuvo.
Pasó momentos peores
Carlos contó que su vida cambió completamente, pero para mal. "Cuando me divorcié entré en una depresión terrible. Lo único que atiné fue a meterme en el vicio, porque no pensaba", dijo.
Por fortuna, terminó con eso. "Me di cuenta que perdí lo más importante de la vida, a mis hijos. Lo único que quiero es recuperarlos y que se sientan orgullosos", manifestó.
Gracias a su mala experiencia, se sintió capacitado para recomendar. "A todos les digo: no se metan en la droga, porque les arruina todo. Es tan fácil meterse y difícil salir. Yo perdí siete años de mi vida y defraudé a mucha gente", sentenció.