En Pedro de Valdivia piden freno a balaceras y asaltos
Una camino sin alumbrado, junto a un sitio eriazo, se ha transformado en un hervidero de delincuencia. Piden acelerar proyecto de iluminación .
Los vecinos que viven a un costado de calle Esmeralda, en Pedro de Valdivia Bajo, cuentan que no pueden salir en paz de sus casas, por miedo a ser víctimas de robos mientras no están. Acusan que a los asaltos, durante los cuales incluso han sufrido golpizas por parte de delincuentes, se suma el terror que sienten con las balaceras. Dicen que los tiroteos se vuelven frecuentes durante los fines de semana y que, a veces, ni duermen por estar en alerta.
Pese a que viven con miedo de distintos grupos de sujetos que han transformado plazas saludables en puntos de intercambio de droga o escaleras en puntos para atacar a los vecinos, estos últimos han decidido denunciarlos. Los residentes de calles Errázuriz y Arrau Méndez afirman que esto debe tener fin y claman a las autoridades por medidas que permitan mejorar la calidad de vida en el sector.
Estefanía Maldonado, dueña de casa, contó que "vivimos con inseguridad producto de la delincuencia y la drogadicción. Se han metido a robar a las casas, en algunas de ellas en más de una oportunidad. Necesitamos apoyo, porque el que hemos recibido es muy poco. Acá ya no podemos salir tranquilos, con toda la familia. Siempre debemos velar porque alguien se quede cuidando y, aún así es peligroso".
Lo golpeó asaltante
Otro vecino, que pidió reserva de su identidad porque se encuentra con una medida de protección tras haber sido golpeado por un asaltante, contó que "me lo encontré en mi casa. Lo vi pasar como una sombra y tuvimos un forcejeo, yo quería que lo detuvieran. Mientras eso pasaba, yo quedé con lesiones en una pierna. Él ahora se encuentra en prisión preventiva". El afectado dijo que espera que el sistema judicial funcione y que las autoridades hagan efectiva su labor.
Si bien acusan que los robos a sus casas están ocurriendo a todas horas, otra vecina que por temor pidió guardar su nombre, contó que "esto se incrementa desde las seis, cuando comienza a oscurecer, más aun con la poca luminaria que hay. Los hechos más graves han ocurrido en una manzana completa, junto al sitio eriazo con máquinas de ejercicios. Allí no hay ninguna luminaria pública. Eso en la noche es una boca de lobo".
Buscan soluciones
En ese sentido los afectados explicaron que sostuvieron reuniones con el municipio luego de que ellos fuesen al centro a contarle su problemática a las autoridades. "Lo malo es que para que aprueben los recursos de las luces y las instalen, podrían pasar más de tres meses. Lo que necesitamos ahora, es que nos ayuden a reducir esos tiempos, por nuestra tranquilidad", añadió una vecina que ha hecho gestiones tras haber sido víctima en dos oportunidades de los robos.
Por su parte, el presidente de la Junta de Vecinos número 32, Pedro Olivares, confirmó que, como comunidad están conscientes del problema que está afectando a quienes viven a un costado de calle Esmeralda. "Efectivamente ahí hay un problema con la delincuencia y la drogadicción, que ha complicado a los vecinos. Nosotros, hemos sostenido reuniones con Carabineros, para ver de qué manera ellos pueden reforzar sus patrullajes con el Plan Cuadrante. Por otro lado, también esperamos postular a un proyecto, a través del municipio, que nos permita contar con alarmas comunitarias".
"Acá ya no podemos salir tranquilos, con toda la familia. Alguien debe quedarse cuidando".
Estefanía Maldonado,, dueña de casa"
4 casas han sido blanco de delincuentes este mes. Incluso han ido dos veces a la misma.