No nos olvidemos del Hanta
El verano terminó y con él las vacaciones y la mayoría de las excursiones, sin embargo, aún está presente el riesgo de contraer el virus Hanta. Una enfermedad que si no es tratada a tiempo puede ser mortal y que es transmitido por el popular ratón de cola larga (su cola es dos veces el largo de su cuerpo).
Según los datos aportados por la seremi de Salud, en lo que va del año, la Región del Biobío ha aumentado en casi cuatro veces la cantidad de infectados.
Su alta letalidad, de aproximadamente un 40%, está en gran medida asociada a que comienzan con síntomas similares a los de la gripe (fiebre, escalofríos, dolor de cabeza y muscular), para luego dar paso a un síndrome cardiopulmonar, que requiere de atención en cuidado intensivos como oxigenación y fluidoterapia.
La prevención es fundamental para evitar nuevos casos. Recuerde que tras los incendios de enero y febrero, los roedores salen a buscar nuevos puntos de alimentación, por eso mantener la basura debidamente cerrada y los productos que consumirá bien tapados aislarán al ratón.
Recuerde siempre que la principal vía de contagio del virus Hanta es la inhalación de heces u orina del roedor, por eso si usará un lugar es importante desinfectar con productos clorados y ventilar los lugares que se encontraban deshabitados y permitir que entre la luz solar, que inactiva al virus.