Ya tienen listo el cotillón para el Año Nuevo en fiestas familiares
En las tiendas que venden este tipo de artículos dicen disponer de todos los objetos de moda y con algunas de las frases que se hicieron conocidas durante este año en nuestro país. Muchos van a ir con pelucas y gorros a los fuegos artificiales.
Mañana se celebra Año Nuevo y son varias las familias que ya tienen listo su cotillón para recibir a lo grande este 2017 y para festejar de lo lindo al ritmo de La Sonora Palacios y Tommy Rey. La verdad es que la noche del 31 de diciembre es para todo Chile es una oportunidad para lanzar la casa por la ventana y esperarla con el mejor cotillón e infaltables cábalas. Los que se imponen, nuevamente, son los bóxer y pantaletas amarillos.
"A mi esposo le gusta bailar y compartir, por eso, todos los años salimos a donde nos inviten junto a la familia", comenta María Eugenia Medina.
Sin embargo, esta vecina de Lagunillas, admite que su celebración comienza mucho antes. Ya que a un par de minutos de que se inicie la cuenta regresiva y se produzca los abrazos, reparte su cotillón, el que causa de inmediato simpatía y aumenta entre sus seres queridos las ganas de disfrutar de la fiesta. "Todos los años me esmero en buscar lo más novedoso para sorprender a mi gente. Me encanta que lo pasen bien… Eso me hace feliz", indica.
¿Y con qué va a sorprender en esta oportunidad?
"Eso no se cuenta… (ríe) Ando viendo algunos globos y challas, porque nos gusta tirar harta a las doce. Igual debo ser sincera, ya que tengo una caja repleta de cosas de años anteriores que igual las tiraré a la cancha este sábado. Así con mi marido, ahorramos un poquito".
Bonito y barato
Al igual que María Eugenia, son muchas las personas que buscan la novedad en cotillón para exhibir y jugar durante la celebración de Año Nuevo. En este sentido, Liliana Carrasco, quien es la encargada del local "Risas y Fantasías", explica que las corbatas con mensajes son la sensación del momento. "Todas traen mensajes que marcaron este 2016 como, por ejemplo, 'para que me invitan si saben cómo me pongo', o 'sólo la puntita' (ríe), entre muchos otros. También están los cintillos con los típicos mensajes. Asimismo, tenemos collares y sombreros, que son los favoritos de los clientes de varios modelos y colores. Por otro lado, están los confeti de billetes, de pétalos, luminosos, etcétera", indica la trabajadora.
¿Les ha ido bien?
"Mmm… sí. Las personas han llegado de a poco a realizar su compra para este Año Nuevo. No hemos tenido lleno el local, pero sí hemos vendido harto. Pensamos que el público, como buen chileno, llegará en masa el día sábado".
Otra de las novedades en lo que a cotillón se trata, son los productos luminosos, así lo asegura Patricia Sepúlveda, quien es vendedora del local de accesorios para cumpleaños "El Arlequín".
"Lo más top del momento son las pulseras, las corbatas y los lentes con luces (…) También tenemos una bonita decoración de sala o entrada que son los globos gigantes 2017, que los tenemos en varios colores, aunque igual hay más chiquititos".
¿Y tienen alguna oferta ideal para Año Nuevo?
"Sí claro, nosotros vendemos cotillones listos para diez personas que traen de todo y a precios módicos. Tenemos antifaces, cornetas, serpentinas, collares hawaianos, gorros y un sinfín de productos desde los 299 pesos y hasta los 5 mil".
Otros preparativos
La familia de María Eugenia no sólo vibra con el cotillón, el bailoteo y el champán. También lo hace con el cariño que se entregan durante los abrazos, y el regocijo que sienten al dar gracias a Dios por todas las bendiciones que les entregó durante el año que está a punto de pasar. "Como cristianos agradecemos por toda su generosidad que tuvo con nosotros", indica la coronelina.
Este acto religioso, es uno más de los tantos rituales que cada hogar realiza para Año Nuevo. Por ejemplo, la tradición de los Castro Vega es realizar una humilde cena y sin ostentar mucho. "Somos una familia súper tranquila y preferimos, durante el Año Nuevo, no gastar mucho en comida", explica Talo Castro.
¿Qué es lo que comen?
"Hacemos un pollo asado, al que condimentamos bien y comemos hartas verduras. Además, nos tomamos un espumante".
En este sentido, la familia penquista explica que su postura ante la celebración de la llegada del 2017, no se basa a un hecho puntual, sino más bien a un estilo de vida que se basa únicamente en la tranquilidad.
"Gastamos poco, porque quienes nos juntamos a festejar no superamos las seis personas. Entonces, no necesitamos muchas cosas. Hoy (ayer) vinimos a La Vega a comprar gran parte de las verduras que nos faltaban y, realmente, nos dimos cuenta que aquí las cosas están mucho más baratas que en otros lugares", comenta Sonia Vega.
¿Y dónde compraban antes?
"Nosotros celebramos el Año Nuevo en nuestra parcela, en Quillón, ahí siempre comprábamos a los agricultores de la zona, sin embargo, ellos venden un poco más caro por el tema de los turistas".
El matrimonio eso sí aclara que en su terreno tienen varias chacras y que, por ende, son pocas las cosas que necesitan comprar de forma extra. "La creatividad es la fórmula para tener una bonita cena sin gastar mucho (…) Además, nosotros aprovechamos de trabajar el primero de enero en el tema de la cosecha de la guinda", explica Castro.
"Nosotros nos acostamos lueguito después de los abrazos. Somos bien tranquilos en ese aspecto. Tampoco somos de ir a la laguna o al río en Quillón. La verdad es que no nos gusta mucho ir donde hay mucha gente. Lo que sí hacemos es un buen asadito al almuerzo del otro día para seguir compartiendo en familia y sanamente", añade su esposa.
"A mi esposo le gusta bailar y compartir, por eso, salimos a donde nos inviten en familia"
María Eugenia Medina."