Al hablar de escritura generalmente se asocia a aspectos estilísticos, dejando de lado la ortografía y la composición. El objetivo de la escritura no es escribir "lindo", sino transmitir un mensaje que sea comprendido por quien lo lee. Sin embargo, existe un grupo de niños a quienes el inicio al mundo letrado se les dificulta más. Se trata de los zurdos, quienes tienen una predominancia cerebral del hemisferio derecho. La escritura tradicional (de los diestros) en occidente es de izquierda a la derecha, los niños zurdos deben aprender a hacerlo al contrario de su tendencia natural que sería de izquierda a derecha, lo cual significa el primer obstáculo del proceso; tapan lo que escriben y la caligrafía tampoco alivia la tarea ya que la cursiva o manuscrita tiene trazos de la escritura diestra, por lo que implica un doble esfuerzo. Estas y otras dificultades han obligado a las personas zurdas a "acomodar" su propio sistema para hacer de la escritura un proceso más amigable. ¿Cómo los podemos ayudar en este proceso? Lo más importante es que los niños sientan que éste es un proceso familiar, no un castigo ni algo traumático. Algunas formas de lograrlo son realizar ejercicios de progresión desde la izquierda a la derecha con diseños de guirnaldas o dibujar las olas del mar; sentarse del lado izquierdo mientras el niño escribe; usar lápices que puedan sostenerse de manera cómoda y hacer ejercicios de lateralidad.

Concepción

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