Cada vez se vuelve más común comprar por internet. Con el surgimiento de las páginas de cupones de ahorro online mucha gente, que en un principio tenía desconfianza de estos nuevos métodos de compra, cayó en la tentación de las ofertas y bajos precios.

Ahora bien, ¿se justifica que la gente le tenga tanto miedo a comprar por internet? ¿Es realmente peligroso? La respuesta, por ambigua que parezca, es sí y no.

Comprar por internet puede suponer un riesgo cuando no se toman las precauciones debidas. Además, hoy es muy normal que existan páginas de Facebook de personas que venden ropa, artesanías y otros artículos directamente, para lo que muchas veces piden un depósito o transferencia bancaria, previo al despacho de lo comprado.

Lo ideal es que revise minuciosamente la página en cuestión, cuándo se creó (puede verlo desplazándose hasta lo más debajo de la página) y si tiene un flujo constante y amplio de clientes. Además, la gente puede dejar sus comentarios y opiniones sobre las transacciones, que puede revisar en la pestaña "opiniones", ubicada a la izquierda del menú de Facebook. Si los compradores escribieron reseñas negativas, mejor no se arriesgue.

Si lo suyo tiene más que ver con compras directas por páginas web, asegúrese que éstas sean conocidas, con amplia reputación y que detallen claramente cuándo y por qué medio recibirá su envío.