Carlos Paz Durán

No le echó la culpa a la cancha ni al árbitro, sino al pésimo rendimiento del equipo. Así de claro fue Óscar Correa al explicar el 1-2 que sufrió Naval el sábado ante Melipilla en el Roberto Bravo, y que lo condena a iniciar en un desfavorable tercer lugar la liguilla de ascenso que parte el fin de semana con los seis primeros clubes de la fase regular de Segunda División.

"Hicimos todo mal. Nada de lo que teníamos planificado resultó. Hubo rendimientos individuales bajísimos", señaló el estratega vía telefónica desde Talca, donde se quedó la noche sabatina para viajar ayer a San Fernando a ver el cotejo entre Colchagua y Valdivia, dos de sus rivales en la liguilla.

Consultado por la ausencia del meta Gustavo Merino en al menos el primer cotejo liguillero, ello a causa de la expulsión que sufrió frente a los melipillanos y que significó el cobro de un penal que selló el 1-2, comentó que "recibió roja en una jugada de fútbol, por lo que no espero más de una fecha de castigo. Toda baja se lamenta, pero tenemos plantel para reemplazarla en buena forma".

Sobre la necesidad de remontar de entrada tres puntos en la liguilla, reconoció que "no era lo que queríamos, pero ya está, ya no podemos rectificar lo mal que anduvimos el sábado. Debemos sacudirnos rápido de eso para enfocarnos en lo que viene".

Respecto al fixture de la liguilla, dijo que la Anfp lo definirá esta tarde en sorteo.

3 partidos ha dirigido Óscar Correa en Naval, y dos de ellos los ha perdiso, ambos de visita.

Falta de efectividad y desconcentraciones le pasaron la cuenta otra vez a la Lamparita, que se despidió de la etapa regular de Segunda División con una derrota 2-1 ante San Antonio. En esta oportunidad, al igual que en otros encuentros, los mineros mostraron un buen juego colectivo, pero no les alcanzó para rescatar algún puntito como visitantes. Tras varias llegadas claras de ambos elencos, el Timón sacó su ventaja en la última jugada de la primera fase. El delantero Maximiliano Alaníz se anticipó a la dupla Vera-Gómez y batió de cabeza al meta canterano Ricardo Torres. Luego del descanso, Lucas Triviño consiguió de entrada el 2-0 y un zapatazo de David Lara, que pilló volando bajo al portero Rodrigo Paillaqueo, se convirtió en el descuento tricolor.

Con este resultado, Lota sigue en puestos de descenso directo y ahora le toca disputar la liguilla para mantenerse en la división.

"Creo que debimos haber marcado más diferencias, salimos con todo a buscar un resultado positivo y no lo logramos. Yo fallé una y ellos la clavaron de vuelta. Ahora hay que trabajar para hacer una buena liguilla. Mostramos un alza que nos deja tranquilos, vamos a jugarnos la vida para salvar la categoría", indicó el central Juan Pablo Vera.

En la misma línea, el DT minero, Pancho Castillo, recalcó que "ya encontramos una forma de juego. Si bien carecemos de finiquito, siempre nos creamos oportunidades de gol, lo cual es positivo. En la liguilla queremos ser superiores y de locales no queremos dar más ventajas".

12 partidos disputarán los carboníferos en la fase definitoria para escapar del descenso.