Cuídese de una insolación
Con las altas temperaturas aumentan las visitas a los balnearios, pero para que un momento de descanso no se transforme en un disgusto, prevenga la insolación.
Se debe considerar, que esta es un tipo de quemadura que se acompaña de otros síntomas generales como fiebre, deshidratación excesiva y podría llegar hasta alteración del sistema nervioso en casos graves.
En cualquier tipo de quemadura por exposición solar, se recomienda aplicar medidas como hidratar y enfriar la piel que en la zona afectada directamente, el uso de vestuario holgado y de algodón y no exponerse nuevamente al sol ni al calor. En los casos más graves, dirigirse a un centro asistencial para evaluación médica, ya que este valorará el grado de la quemadura y la presencia de complicaciones sistémicas, dando así tratamiento adecuado, ya sea de uso local y general. En estos casos no es aconsejable aplicar ungüentos caseros, ya que en algunas personas estos pueden empeorar el cuadro.
Por ello, para evitar tener unas malas vacaciones, lo más importante es prevenir la insolación utilizando bloqueadores solares y sombreros de ala ancha idealmente, pero lo más recomendable, es no exponerse al sol en horarios ni en días en que el índice de radiación ultravioleta sea de riesgo.
Estas medidas deben exagerarse en los casos de embarazadas, adultos mayores y niños.