Mario Saavedra Ponss
El accidente que sufrió un niño de ocho años, en una multicancha, paralizó a los vecinos de la población Gabriela Mistral de Lota. Desde un poste de nueve metros, se desprendió un foco que pesa más de cinco kilos y cayó sobre la cabeza de un pequeño que jugaba junto a sus amigos. El menor resultó con una fractura en el cráneo y cayó inconsciente, desatando dramáticas escenas en el lugar.
Cerca de las seis de la tarde, sus compañeros de juego corrieron a avisar a su familia, dos cuadras más arriba en el cerro. Su tía, Rosa Orellana, contó que "estábamos desesperados, corriendo de allá y para acá esperando una ambulancia que tardó mucho en llegar. Los Bomberos llegaron y lo atendieron primero".
Vitalia Medina, una de las testigos del hecho, contó que el menor "tenía su cabecita llena de sangre. Esto pasó porque un niño tiró la pelota y le pegó al poste. Eso hizo que se soltara eso de arriba, cayéndole al niño".
El pequeño, contó su familia, fue estabilizado en Lota y trasladado durante la noche al Hospital Regional de Concepción. Sus padres lo estuvieron acompañando en todo momento, explicaron sus cercanos. Esperan que el menor, quien al día siguiente esperaba ansioso un paseo con sus amigos, no resulte con alguna secuela producto del golpe.
Piden mantención
Los vecinos del barrio dicen que el accidente no fue producto de la mala suerte. Marcos Pincheira, presidente del club de fútbol 11 de Septiembre, dijo que "llevamos mucho tiempo reclamando por el arreglo de esta multicancha. Hace un tiempo se hizo mantención, pero fue sólo pintar los fierros oxidados. Por eso pasó lo que pasó".
Cables al aire
Junto con evidenciar el mal estado de los mástiles de fierro, de las rejas y de la carpeta de la multicancha, los vecinos expresaron su preocupación por los cables que energizan los postes. Muestran que están a la vista y temen otro accidente. Piden un arreglo porque en el verano la multicancha es el punto de reunión de la mayoría de los niños de la población Gabriela Mistral.
5 kilos pesa el foco, que cayó en la cabeza del pequeño de ocho años. Vecinos lo guardaron.
18 horas marcaba el reloj, cuando se desató el accidente en la cancha de la población.