Secciones

El hualpenino en Japón que luce los guantes de Bravo

E-mail Compartir

Juan Fariña López

Un inesperado llamado le cambió la vida a un futbolero llamado Gonzalo Muñoz. Es que este joven, oriundo de Hualpén, se ganó un viaje doble a Japón con todos los gastos pagados para ver el Mundial de Clubes, tras participar del concurso "Fútbol Non Stop" del Banco BBVA junto a Visa.

"Me enteré de esta chance en la página web del banco, mientras realizaba una transferencia. Allí, apareció un banner que decía 'Fútbol Non Stop', me inscribí e ibas anotando goles por compras en tu tarjeta de crédito. Cada gol era equivalente a un cupón, que se sorteó en una tómbola virtual y pese a entrar algo tarde a la promoción pude ganar", explicó el suertudo, que se pegó el pique a Japón junto a su polola, quien no le creyó cuando le contó la movida a mediados de noviembre.

"En un principio, ella pensó que era una estafa, pero en definitiva llegamos al banco, nos felicitaron y recibimos el premio", manifestó el muchacho.

De esta experiencia única, que consiste en asistir a los dos duelos del Barcelona en el torneo disputado en Tokio, Muñoz comentó que "dentro del estadio los tickets son en un lugar VIP, con acceso a la cancha en la zona de fotógrafos. Además, el hotel donde nos hospedamos es espectacular. Ha sido sorpresa tras sorpresa nuestro paso por Japón, inclusive nos dieron una tarjeta adicional con 500 dólares para que gastemos".

con guantes en mano

Este miércoles, la pareja disfrutó de la semifinal entre el Barça y Guangzhou. En la previa del duelo, ambos aprovecharon sus accesos a la pista atlética para intentar interactuar con el plantel catalán y vaya regalito que se llevaron.

"Los primeros en salir a a la cancha en el calentamiento fueron los porteros y entre ellos, por su puesto, estaba Claudio Bravo. Obviamente, comenzamos a gritarle y a flamear la bandera de Chile que llevamos al estadio. Él nos saludó con la mano, pero inmediatamente la gente de Visa nos advirtió que nos podían sacar del estadio, así que nos alejamos", recordó.

"Poco antes que terminara el partido no pusimos de acuerdo con mi polola. Ella se quedó con las cosas y yo fui al túnel por donde salían los jugadores. Como ya sabía que Bravo nos había visto fui para saludarlo y desearle suerte. En eso me apegué a la baranda y comencé a gritarle. Él me vio, se acercó y me pasó sus guantes. No lo podía creer, fue impresionante el gesto que tuvo. Todos se sacaban fotos con los guantes y se los ponían, me felicitaban", indicó el emocionado hualpenino, que ya se prepara para ver la gran final de mañana entre los culé y River Plate. J

Del viaje, Gonzalo apuntó que "estamos ultra agradecidos por está experiencia tan especial de ver a Bravo en el Barcelona y más encima tener sus guantes lo hace impagable. No sé cómo lo vamos a hacer para ordenar todas las fotos que tenemos de este paseo".

Todavía no habría dueño del arco culé en el Mundial

E-mail Compartir

Claudio Bravo se llenó de elogios tras su gran actuación en el triunfo 3-0 del Barcelona sobre el Guangzhou chino por las semis del Mundial de Clubes. Los medios españoles destacaron que "tuvo una prodigiosa intervención y una mano salvadora" al evitar el empate parcial de los asiáticos. Pero al parecer no es suficiente para el técnico Luis Enrique. Y es que ayer en España pusieron en duda que el capitán de la Roja vuelva a ser el escogido para atajar en la final de mañana ante River Plate. "Y llegó la semifinal del Mundial de Clubes y Luis Enrique apostó... por Bravo. ¿Qué sucederá? Marc-André fue titular en la final de la Supercopa de Europa y en la ida de la Supercopa de España; Claudio ha jugado la vuelta del torneo español y la semifinal del Mundial de Clubes", señala el periódico catalán Sport. El mismo medio agrega que "a todo esto, el debate sigue abierto porque hay muchos que consideran que hoy el chileno es un meta más fiable, mientras que otros piensan que el alemán, con más continuidad, es la apuesta de futuro que debe impulsar Luis Enrique". Sólo el DT asturiano tiene la respuesta. Volver a confiar en Bravo o darle la chance a Ter Stegen. He ahí el dilema. J