Samuel Orellana vive en Santa Juana y todas las mañanas se dirige en su auto a su trabajo, que queda en Coronel. Pero la mañana del miércoles fue distinta, ya que sorpresivamente se encontró con una güiña, que se encontraba herida a un costado de la ruta.

Según contó el trabajador, iba en una fila de automóviles cuando cerca de la calzada vio al animalito, una especie de gato salvaje, sin saber si lo había atropellado algún vehículo o bien estaba simplemente ahí.

"Paré el auto y me di cuenta que se trataba de una güiña, que es una especie protegida, y la subí al vehículo y seguí el rumbo a mi trabajo. Quería dejarla en una clínica veterinaria para que lo atendieran, pero en el trayecto el animalito se activó y me dio un poco de miedo seguir con él al interior del vehículo. Como despertó y no se veía sangre, ni lesiones a simple vista, lo bajé y lo dejé en el bosque al costado de la ruta", relató.

Añadió que "todo el día estuve pensando en el animalito, así que cuando me venía de regreso a mi casa lo pasé a ver y lo encontré a un par de metros del lugar en que lo había dejado".

al veterinario

Miguel Ángel Araneda, médico veterinario de Santa Juana, fue contactado para que viera al animalito herido. "Cuando lo revisé no tenía lesiones cutáneas, tenía un dolor lumbar y estaba bastante deshidratado. En la clínica lo estabilizamos, se le puso suero, se le dieron medicamentos y amaneció mucho mejor, ya está comiendo y tomando agua", manifestó. J

Luis Cifuentes Villegas

Más de 200 personas que fueron afectadas por la inundaciones del 2006 llegaron ayer hasta la Corte de Apelaciones de Concepción para tener respuestas sobre sus indemnizaciones. Se trata de la demanda más grande contra el Estado que actualmente se tramita, tanto por el número de afectados, como por el valor de ésta.

Yolanda Contreras, vecina de Los Lirios y vocera de los inundados de Collao, Palomares y Chillancito, entre otros sectores afectados ese año por las fuertes lluvias, manifestó que "estábamos apelando, porque en una primera instancia (2008) perdimos la demanda, pero estamos apelando porque creemos que tenemos la razón", sostuvo.

Son, en total, 7.760 personas afectadas por las inundaciones y desborde de ríos registrados en 2006.

"Estamos convencidos de que nos inundamos por falta de servicios del MOP, ya que el sistema de evacuación de aguas lluvias era deficiente", sentenció la representante.

La vocera añadió que esta demanda es por daños morales y que "estamos pidiendo 35 millones de pesos por cada miembro de la familia afectada".

Tras dos horas de alegatos en la Segunda Sala del tribunal de alzada penquista, los afectados quedaron a la espera de si se acoge o no la demanda, luego de que la Corte dejara en estudio el fallo.

Verónica Careaga vive en Chillancito y ella, como muchos de sus vecinos, lo pasó muy mal producto de las inundaciones. En ese entonces, contó, su hijo estaba bajo quimioterapia y que por suerte su casa es de dos pisos, pero el baño y la cocina estaban en la planta baja y, producto de la inundación y el barro, estuvieron cerca de un mes sin poder ocupar esos espacios.

senador

El senador Alejandro Navarro, en tanto, sostuvo que "esperamos un resultado favorable, toda vez que existen fallos anteriores, como en el caso de Papen, donde la Corte Suprema estableció que existió una flagrante falta de servicio por parte del Estado, al no construir las obras que se señala en el Plan Maestro de Evacuación y Aguas Lluvias de Chiguayante", indicó. J

El temporal de fuertes vientos y lluvias golpeó a la zona el 2006 desde el 10 de junio hasta el 23 de agosto, y ha sido calificado como el peor de los últimos 30 años en Chile. La crecida del río Andalién y el estero Nonguén en Concepción inundó extensas áreas, dejando miles de damnificados.