Cecilia Bastías Jerez
Complicados se han visto los locatarios cercanos a la Plaza Perú, en Concepción, quienes sostienen que a un mes de empezar las obras de remodelación del sector han notado baja en su clientela.
"Vemos que la construcción no avanza mucho, nosotros entendemos que se demorarán solamente tres meses en este lado, pero creo que se ha trabajado bastante lento y es incómodo", señaló Sebastián Morales, del local Fusión Urbana.
"Deberían mejorar la barrera, la malla no es un obstáculo para detener la tierra, las mesas tenemos que limpiarlas cada 30 minutos. La clientela ha bajado, por eso, y por el ruido, aunque sabemos que es algo necesario", añadió.
Por su parte Marcela Iglesias, de Diagonal Restobar y miembro de la Asociación Gremial Gastronómica de la Plaza Perú, comentó que hasta el momento no han tenido mayores problemas y que es muy pronto para emitir un juicio. "Pero la verdad es que va muy lento, demoraron como 15 días en poner unas rejillas. Al menos ha llovido y no hemos tenido mucho polvo, pero la barrera no es suficiente porque pasa la tierra", dijo.
En una primera instancia no se había puesto una separación, según relataron los locatarios, por lo que la pidieron y se accedió a las barreras actuales.
"No hemos reclamado porque aún no tenemos grandes problemas, pero si empieza a quedar la escoba con la tierra suelta, además después nos sacarán las terrazas, ahí tendremos problemas", comentó.
"Sabemos que la obra ha ido avanzando, pero nos trae molestias porque las máquinas retroexcavadoras levantan mucho polvo y ruido", dijo a su vez Juan Pablo Vargas, locatario del 30 Express.
"Las medida medioambientales no se están tomando, ellos levantan la tierra y no la mojan. En este minuto ha bajado el público, este septiembre no es lo mismo que el año pasado", manifestó. J
Las obras del proyecto Rambla II comprenden más de 10 mil metros cuadrados en la Diagonal Pedro Aguirre Cerda de Concepción, que desde 1940 no había tenido intervenciones en su infraestructura. Se trata de una inversión cercana a los 1.600 millones de pesos. Las faenas comenzaron a mediados de agosto y tienen un plazo de 365 días para la entrega y, además de las modificaciones en superficie, está considerado la renovación de los colectores de aguas lluvia.