Mario Saavedra Ponss
Siete de la tarde en el Valle Escondido de Paicaví, en Concepción, y el barrio entero se había reunido en una esquina para presenciar el rescate del que, para muchos, es el símbolo del sector. El caballo "Soñador", cayó a un foso que se encontraba destapado en una vereda, con jinete y todo. Estuvo casi dos horas sin poder salir y tanto el guardia como los vecinos y los niños, pensaron que lo perderían.
Sin embargo, entre todos lucharon por ayudar al animal que, desesperado, trataba de estirar el cuello hacia arriba. Pero no había forma de sacarlo desde el fondo de 2x3 en el que se encontraba. Óscar, el jinete, relató que "todo comenzó mientras iba con el caballo por la calle. El animal hizo algo que no hace nunca, que fue asustarse cuando un auto pasó rápido junto a nosotros. Después de eso, cayó con los posteriores a esto, que estaba justo sin su tapa. De ahí, fue puro luchar junto a la gente que nos ayudó".
Rodrigo González, teniente segundo de la Tercera Compañía de Bomberos de Concepción, indicó que "el caballo estaba en un foso de fibra óptica, desesperado por salir. Lamentablemente las ideas de quienes estaban aquí no funcionaron. Lo que hicimos para sacarlo, fue idear un plan, dentro del cual llenamos con agua el espacio en donde estaba atrapado. Así, le dimos flotabilidad al animal y eso permitió que se acercara hacia arriba, para poder liberarlo. Por eso tuvimos que pedir un carro".
Entre pausas, se jalaba al animal usando huinches y cuerdas. En cada descanso se escuchaba su respiración agitada, pero en ningún momento su compañero lo dejó solo. Óscar, sin ser rescatista, guió el operativo junto a vecinos, trabajadores del sector y Bomberos.
Gracias al agua, una pala mecánica y la fuerza de más de diez personas, "Soñador" logró salir y volver a correr sin aparentes fracturas, que era la lesión que todos temían. Al animal lo revisó un veterinario cuando se calmó. J
Según explicaron los vecinos, el caballo es muy importante para ellos porque es un amigo más. "Para los niños es lo máximo. Cuando 'Soñador' anda por acá, ellos se suben y él los pasea. Es como la mascota del condominio. Por eso todos estábamos muy preocupados. Los más chicos, especialmente, tenían miedo de que le pasara algo malo. Ese caballo es nuestro punto de referencia", contó la vecina Ximena Castillo.