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Los precios del carnet de identidad y pasaporte subirán desde el 1 de octubre de 2015. El alza obedece al fin de un subsidio estatal con el que contaban los documentos y a la necesidad de cubrir los gastos de operación de las nuevas tecnologías implementadas en 2013.
Así desde el décimo mes del año el pasaporte de 32 páginas, que hoy tiene un valor de $48.900, costará $89.660; y el de 64 páginas, que hoy cuesta $60.720, pasará a valer $89.740.
Las cédulas de identidad tendrán un incremento menor, pasando de $ 3.600 a $3.820. Para los extranjeros subirá de $ 4.050 a $4.270.
El alza fue informada desde el Servicio de Registro Civil, donde aseguraron que la decisión se basa en un criterio de justicia, para que "no sean todos los ciudadanos quienes financien a través de sus impuestos, los pasaportes de quienes viajan".
En un comunicado, la entidad estatal recordó que el proceso de modernización de los documentos de 2013 no se traspasó a los usuarios.
Ante las críticas que generó en la población el alza de casi un 100% en el caso del pasaporte, la ministra de Justicia, Javiera Blanco, dijo que los pasaportes se ocupan para salir al extranjero y en el 85% de los viajes que se realizan desde Chile sólo se requiere el carnet de identidad.
Los nuevos documentos le significaron al Estado un gasto de $30 mil millones.
Respuesta equivocada
Desde la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (Conadecus) la noticia no cayó bien, pues aseguran que los chilenos prefieren el pasaporte a usar sólo el carnet de identidad, aunque esté permitido, pues evita varios problemas de identificación en el extranjero .
"Esto es un servicio y debería haber seguido el subsidio tal cual. De hecho, la modernización debe haber provocado una rebaja en los costos fijos del Registro Civil; por lo tanto, aquí hay una respuesta equivocada, donde se busca una rentabilidad comercial y no social", afirmó el presidente de Conadecus, Hernán Calderón, a La Estrella. J