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La bachata y la salsa se suman al clásico vals de los novios: descubra dónde aprenderlos

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cecilia.bastias@estrellaconce.cl

En el mundo de la preparación de la boda soñada, cada vez se han ido profesionalizando más los distintos detalles y etapas de ese momento tan especial.

Primero fue el banquete, luego la torta, después los fotógrafos cada vez más especializados y ahora el acento se pone en el baile de los novios, el cual tiene que tener gracia, sensualidad y mucha coordinación.

Para lo anterior, en Concepción ya existe un amplio mercado de academias que ofrecen cursos especiales para novios, de tal forma que puedan ofrecer un lindo espectáculo a sus invitados. Las opciones van desde el vals clásico, hasta la bachata.

Vals Clásico

Erna Villalobos Escalona es profesora de ballet clásico hace 35 años y hace 10 que comenzó a trabajar en la preparación de novios para el vals. "Empecé a hacerles clases a mis alumnas que se casaban. Mi academia funciona en las instalaciones de la Ymca", comenta la profe.

En cuanto a la cantidad de alumnos que ha tenido en este curso, afirma que hay harta demanda y que se comunican a través de Internet o por referencias. "Llegan novios de diferentes gustos. Unos quieren bailar solamente el vals, otros quieren bailar un tema que a ellos les trae recuerdos y eso lo hacemos en tiempo de vals", detalla.

"A veces quieren hacer algo distinto y quieren bailar un tango que va ser sorpresa para la gente que va al matrimonio. Me han pedido de Michael Bublé, por ejemplo", comenta.

El curso consiste en tres clases de una hora y media cada una. "Primero aprenden a tomarse, porque el vals es elegante y después a desplazarse en el tiempo que corresponde que es: un, dos, tres", afirma.

En cuanto a si es el hombre o la mujer a quién le cuesta más aprender, Erna cuenta que es bastante relativo. "A veces pienso que al novio que costará más y le cuesta más a la mujer. A veces a los dos les cuesta, pero lo bueno es que todos salen bailando. Además, yo soy súper relajada, tengo mucha paciencia para enseñar, así que no se ponen nerviosos, hay algunos que piden una clase adicional, pero es más para adquirir seguridad", explica.

"Para mí como profesora de ballet, esto es nuevo, porque es gente que nunca ha bailado, no tienen nociones de baile con técnica. Aquí uno enseña un poco de técnica, como no arrastrar los pies y levantar los talones", sostiene.

Erna comenta que ha habido ocasiones en que ha estado invitada al matrimonio de la pareja a la que les ha enseñado. "Se siente mucha satisfacción cuando la gente los aplaude. Es lindo verlos bailar en la fiesta", asegura.

"Yo recomiendo que hagan el curso, porque he visto a veces unos vals de novios que dan pena. La novia gasta una gran cantidad de dinero en su traje y no se luce. La idea de estas clases es para que se luzcan y que sea un espectáculo para la gente que los acompaña, para que lo pasen bien", afirma.

"Yo siempre veo el tipo de novios que llega, si les gusta y quieren lucirse, les hago una coreografía más difícil, pero la idea es que no sea un vals común y corriente. Siempre tenemos pasos adicionales porque podría haber un bloqueo, pero como nadie más sabe la coreografía no es tan notorio. Lo más bello es el final, queda muy bonito, especial para la foto", cuenta.

SALSA Y BACHATA

Renata Castillo y Favio Bustos son pareja de baile profesional hace tres años. Ambos están especializados en ritmos latinos y comentan que hace un año están dando clases a novios.

A ellos se les puede ubicar en la academia de Ximena Bizama, en Galvarino con Barros Arana. "Primero eran dos parejas que eran alumnos nuestros, nos pidieron hacer un baile especial para su matrimonio", detalla Renata.

"Como primera vez nos pidieron hacer coreografías de ritmos latinos y fue más o menos fácil. Después comenzamos a practicar el tema del vals y coreografías de cha cha chá", afirma la profesora.

Ellos ofrecen 6 clases de 1 hora cada una. "Por lo general, al principio, los novios no se ponen nerviosos, pero cuando se acerca el evento si lo hacen. Nosotros les decimos que los invitados no se saben la coreografía, entonces no tienen de qué preocuparse y si les pasara un percance tienen que seguir, como que aquí nada ha pasado", señala a La Estrella.

Por su parte, Favio Bustos, cuenta que hace poco está creciendo la preocupación por el baile en los matrimonios. "Muchas veces los novios no saben qué hacer, cómo bailar y hacen una cosa de 3 minutos que es un poco fome, ver un vaivén que no termina nunca", dice.

Sin embargo, Bustos señala que cada vez se está innovando más, se hacen coreografías de las puras novias, se hacen flashmob. "Donde estás en una situación y se comienza a hacer un show como que no estaba preparado", detalla el profesor.

"A los chilenos les cuesta bailar, lo que más complica es coordinar, entrar en el ritmo con la música. No hay mucha cultura del baile en Chile, cuando son niños y cuando ya son grandes es un poco difícil, porque no están habituados a eso. No nos ha tocado ver parejas que quieran bailar cueca, hay de toda la diversidad y ahí se nota la falta de apego a nuestra propia cultura", afirma.

"Las parejas que llegan a nosotros llegan porque vieron algo parecido en otro lado y quisieron hacer algo diferente. Todos llegan diciendo: queremos hacer algo diferente. O quieren hacer bien el vals", describe.

Solo en este verano Favio y Renata han preparado a 12 parejas. Comentan que tienen algunas agendadas para el resto del año, pero el fuerte es en verano.

testimonio

Camila Figueroa, de 30 años, se casó el 30 de noviembre 2013 con Robert Cisterna. Ella vio en una exponovios a Renata y Favio. "En mi caso, el novio tuvo que convencerme de bailar, porque a él le gusta la salsa, ya que yo no bailo. Entonces me costó decidirme por el temor a hacer el ridículo, pero con los profesores se hizo mucho más fácil y te hacen sentir confiada", cuenta.

"Nos preparamos como por un mes, elegimos la música y los pasos que nos acomodaban a ambos, ellos son bien comprometidos con que salga el baile bonito. Es entretenido te permite generar una confianza, y aprendes a entregarte a tu pareja en el baile", comenta Camila.

En el caso de esta pareja eligieron un momento bastante estratégico de la noche. "A las 3:30, más o menos, se bajaron las luces y hubo un cambio en la música. Quedaron todos sorprendidos y prendió la fiesta, quedaron maravillados con el baile. También hicimos el vals al comienzo, no fue cualquiera, contratamos a un saxofonista y después bailamos una bachata", detalla. J