Mauricio Basualto y su vida en Conce: "Me salí del escenario y me senté entre el público"
l Karen Loreto Retamal
Para él, la vida tiene ciclos y la suya en Concepción no estaba cerrada. Por eso, una vez que decidió dejar Ciudad de México, la idea de volver a su tierra natal fue una propuesta fuerte. Tenía que hacer algo más en su zona. Las cosas se fueron dando a la perfección y hoy, Mauricio Basualto, baterista de Los Bunkers, figura viviendo en el centro penquista. Es el único del grupo que decidió volver a su tierra.
vida penquista
A un par de meses de lo que él define como "un entre tiempo" del grupo local, el músico ha retomado todas esas cosas que le gustaban de la capital provincial: caminar por sus calles, ir a la Universidad de Concepción, visitar a su familiar y enseñarle y compartir con su pequeña hija Eva, de 5 años, todos los lugares emblemáticos de la comuna. Lo pasa bien y asegura que "empezamos a vivir una vida que es súper entretenida. Nos fuimos a vivir al borde de la plaza, a disfrutar de Conce, de los amigos, del aire y ha sido hasta el momento un regreso súper motivante, divertido".
"Yo creo mucho en el ciclo de la vida, criar a mi hija en un ambiente familiar, llevarla a la universidad, ir a Los Patos, correr por el parque, ir al cerro", reitera, contando que instalarse en la zona "fue una decisión que fuimos tomando de a poco, al principio no lo teníamos claro, pero se fueron dando las oportunidades. Yo, por lo menos, creo que cuando pasan estas cosas, la vida te va dando señales, se te van mostrando caminos. Se dio por circunstancias súper naturales. Mi esposa siempre había querido vivir en Concepción (ella es santiaguina). Siempre fue fans de la música, le gustaban los Santos Dumont o de los Tres, le gustaban Los emociones Clandestinas. Siempre me contaba que cuando estaba en la universidad vino a un seminario a la UdeC y le encantó. Siempre tuvo un vínculo con Concepción, con el que terminó teniendo un marido y una hija penquista".
De Los Bunkers, los hermanos Álvaro y Gonzalo López se quedaron en Santiago; mientras que Mauricio y Francisco Durán se quedaron en México.
"¿Por qué me vine a vivir a Concepción? Porque soy de aquí no más. No creo que haya tantas razones especiales. Me vine a Concepción, porque es mi casa. Quedé con la sensación de que cuando uno tiene tiempo para uno se va para su casa. Yo me había ido a Santiago a vivir por otras razones, no me fui por músico, sino que a estudiar", dice.
De regreso al trabajo
Los primeros meses en Concepción fueron para su familia y él. Confidencia que le gusta hacer las cosas que hace todo el mundo. Es por ello que se sorprendió a ver que Los Giocos seguía abierto, por lo que no dudó en llevar a su hija hasta el emblemático lugar de juegos. Van varias veces en la semana".
"Estoy recuperando todos los espacios y recuperando al máximo. El tiempo de lo que estoy haciendo ahora, no sé cuánto va a durar, no me interesa tampoco. Ha pasado tan poco, que todavía lo estoy disfrutando", manifiesta.
Es por ello que, hasta ahora, no ha extrañado estar sobre un escenario. Cree que más adelante quizás le suceda. Por ahora se preocupa de dedicarse a su familia, amigos y sabía que, como la vida tiene ciclo, algo más tenía que hacer acá. Así que, cuando la Corporación Cultural de San Pedro de la Paz lo invitó a trabajar con ellos, no dudó en aceptar el desafío.
"Estoy de productor ejecutivo. Mi trabajo es dar a conocer las cosas que la corporación hace a nivel de cultura. Acercar a la gente a la corporación. Me encanta que sea en San Pedro, porque es como mi casa", cuenta, añadiendo que se encontró con un grupo humano muy bonito.
"Volver a un mundo real del trabajo, con horarios, hace súper bien", señala, aunque es enfático en recalcar que ser músico también es un trabajo.
Antes de esta pega, Mauricio trabajó en Diario Crónica, hasta 1998, cuando se fue a Santiago. De eso recuerda haber sido agente de ventas. "Era publicidad, no vendíamos centímetro-columna, sino que era la pega completa. Es loco, porque era antes del computador, todo se hacía a mano. Nosotros despachábamos camisas originales, se rayaba con un lápiz. Había que hacer hartas cosas más, que ahora estás sentados en el PC y haces todo. En ese tiempo generé muchos vínculos", recuerda.
Ahora está sumado a la cultura y siente que es bueno que "los retornados" se incorporen a la vida y si pueden ayudar, hacerlo.
"La cultura siempre la había visto desde afuera y gestionarla es bastante más entretenido de lo que pensaba. Estoy desde la otra vereda. Me salí del escenario y me senté entre el público", señala.
A este trabajo en la Corporación se suma el volver a tocar con sus Los Amigos de Doctor y ser el productor de la banda local Julia Smith. Eso ha sido su vínculo con la música por ahora, dice.
¿Cuándo vuelven?
Es inevitable no preguntarle por el receso de Los Bunkers. Pero Mauricio Basualto se lo toma como la pregunta de rigor. "Siento que el trabajo del grupo terminó su primer tiempo y ahora estamos en el entretiempo. Nunca hemos hablado de cuánto tiempo estaremos stand by. La verdad es que nunca fuimos de planear las cosas, jamás", cuenta el baterista.
"A mí a veces me da un poco de pena que se piense que trabajar en un grupo musical sea diferente que tener un grupo de investigación. Los grupos humanos tienen dinámicas internas que se van gestando con el tiempo, que van distanciando o generando lazos. Todo el mundo necesita tomar distancia de lo que le pasa y no tiene nada que ver con que tengas un roce con el otro. Yo siento que nosotros estamos haciendo bien las cosas y es algo súper importante, porque nosotros le dedicamos cuerpo y alma a la banda y no nos habíamos dado un tiempo", explica.
Mauricio Basualto llegó a Los Bunkers el 2000, cuando el baterista del grupo no quiso viajar a Santiago (él ya estaba allá).
"Cuando uno empieza un grupo no sabe lo que va a pasar, pero pasó todo lo que pasó con el grupo. Cumplimos casi todos nuestros sueños hasta ahora, no nos quedó casi nada pendiente. Tocamos en todo Chile, en el extranjero, tuvimos conciertos grandes, chicos, grabamos discos. El grupo tiene una primera etapa que se está llevando súper bien, porque hicimos el trabajo muy bien. Más adelante vendrá otra etapa", señaló. J
"Fue una decisión
que fuimos
tomando de a
poco, al principio
no lo teníamos
claro, pero se
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