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Se traslada la condición de local, pero no la negra suerte que han tenido en dicha condición. Así lo creen los jugadores navalinos que el domingo, desde las 17.00 horas y ante Deportes Valdivia, disputarán su primer partido en el Estadio Municipal de Hualpén.

Los choreros jugaron sus cotejos anteriores en casa en el Municipal de Tomé, donde sufrieron derrotas de 0-1 con Linares y Puerto Montt, y de 0-2 contra San Antonio Unido.

Ese cero punto y cero poder de gol de anfitrión, más dos expulsiones, es el registro que los albiazules pretenden cortar de raíz en la cancha de pasto sintético del reducto hualpenino.

"Acá es el lugar ideal para salir de perdedor de local", señaló David Villarroel al término de la práctica de ayer en el recinto que reemplazó al Estadio Las Golondrinas.

"Llevamos como dos semanas entrenando en el lugar, de modo que ya lo conocemos. Es un punto a favor", recalcó quien el 2009 defendió a Chile en el Sudamericano Sub 17 que se realizó en Iquique, y que ante las ausencias de Mario Salgado y Andy Lacroix será el capitán frente a la escuadra valdiviana.

"Ahora que jugaremos al lado de Talcahuano, vendrá más gente a vernos", añadió el central.

Esa cantidad de gente, en todo caso, no podrá sobrepasar las 800 personas, pues es el aforo autorizado por Carabineros.

Gustavo Merino, que el domingo sumará su sexto lance de titular bajo los tres postes, afirmó que "el fin de semana despegamos en casa".

"Aunque la cancha hualpenina es chica, ya nos acomodamos a ella, y al interior del plantel se ha hablado el tema de las expulsiones que nos afectaron en los dos últimos partidos en Tomé. Eso no se puede repetir", dijo el arquero de Caleta Lenga.

Excepto la de Salgado, que cumplirá la última de sus dos fechas de suspensión, y la de Lacroix, que en el 0-0 con Ovalle sufrió la luxación del hombro izquierdo, el Ancla no registra más baja.

Incluso recuperó a Jeryberth Carrasco, quien ya dejó atrás su fecha de castigo.

Todavía no pagan

Aparte de Valdivia, la otra preocupación navalina es que aún no se ve un peso de los sueldos adeudados, a los que el 15 del presente se sumó el salario de septiembre.

"De ánimo estoy bien, pero de bolsillo mal", dijo uno de los integrantes del plantel. J