l Andrea Neguiman Pozo
La muerte de una niñita de cinco años por culpa de un incendio que destruyó su casa en el Cerro La Unión de Talcahuano, dejó en evidencia, una vez más, el peligro en que se vive día a día en los campamentos del Gran Concepción. No hay grifos, las calles son muy estrechas… en fin, hay una serie de situaciones que impiden a los equipos de emergencia trabajar en óptimas condiciones.
"Nuestro sentimiento como comunidad es de mucha molestia y de mucho pesar por la situación que ocurrió. Principalmente, porque esta situación tan trágica que se desarrolló en el cerro se anticipó y se informó a las autoridades pertinentes", expresó José Romero, presidente de la junta de vecinos número ocho "Unión San Vicente Talcahuano".
En este sentido, el dirigente comentó a La Estrella, que ya varias veces se ha solicitado la instalación de grifos en el asentamiento, sin embargo, sus deseos aún no se pueden materializar.
"Hicimos todas las gestiones que debíamos hacer para que no se llegara a un episodio como tal. Entregamos la solicitud para evitar esto, pero tuvimos una nula respuesta", añadió Romero.
El lamentable episodio que terminó con la vida de la pequeña Danay, es una constante preocupación para los dirigentes de los 153 campamentos que hay en nuestra zona, según cifras entregadas por la fundación Techo-Chile.
"En el campamento somos doce familias. La realidad que vivimos hoy es que tenemos luz y agua. Pero fue una lucha muy grande. En estos momentos, todas las casas se proveen de agua con sólo un medidor", indicó el presidente del Comité de Vivienda de Caleta Lenga, Yerardo Sanhueza.
Dicha situación, sin embargo, repercute en la presión con que sale el agua de las llaves. "No sale casi nada. Estamos siempre preocupados de prevenir un incendio, porque no tendríamos la capacidad de apagarlo. Incluso, nos organizamos de tal forma, para que las familias puedan realizar sus actividades diarias de acuerdo a horarios. Por ejemplo, para poder lavar la ropa debemos esperar hasta las una o las dos de la madrugada para no intervenir en las actividades que son más importantes en el día", sostuvo el dirigente.
Al igual que los vecinos del cerro chorero, en el campamento de Lenga no tienen grifos cercanos, lo que genera un escenario propicio para una tragedia. "No tenemos nada. Lo único que nos podría ayudar en una situación de peligro, es el río. Lamentablemente igual dependemos de si está lleno o no. Si se produce un incendio sería dramático, porque todas las casas son de material ligero y creo que en menos de diez minutos el fuego las consumiría. Para nosotros el verano es más crudo, ya que el río baja harto", explicó Sanhueza.
Lo descrito por este dirigente es muy parecido a lo que deben vivir los vecinos del sector Coliumo Alto de Talcahuano. "Siempre es una preocupación el sistema de red de emergencia que existe", señaló Margarita Fuentes. J
l Ante lo manifestado por los pobladores, el director regional de la fundación Techo-Chile, Pedro Cisterna, sostuvo que "siempre hay dificultades para acceder a algunos de los tres servicios básicos (agua, luz o alcantarillado). Creemos que hoy en día es necesario brindar a las comunidades, en esta espera de la solución habitacional definitiva, ciertas condiciones de seguridad". "Han ocurrido accidentes lamentables, como lo que sucedió hace algunos días en el Cerro La Unión. el grifo más cercano estaba a 400 metros", dijo.