l Andrea Neguiman Pozo
Un gran asombro causó entre los trabajadores de la Vega Monumental el hallazgo de una lechuza, que bastante asustada por el ruido del recinto, se escondía muy tranquila en el interior de un camión.
Su descubrimiento lo realizó un feriante del local "Donde Samuel", mientras bajaba zapallos y papas desde el vehículo de carga. "Estaba en la parte de atrás del camión de un talquino (...), tenía agarrado su pico en la malla. Resulta que la vimos con otro compañero, pero pensábamos que era una paloma, porque tenía las plumas blancas", expresó Carlos Venegas.
La impresión de los trabajadores de la Vega fue harta, sin embargo, no dudaron en ayudar al animal al verlo herido. "Me subí y la saqué de la malla. La sacamos con temor. La tomamos con un pedazo de cartón, es que nos dieron miedo las garras que tenía", señaló Venegas.
El susto de los trabajadores fue en vano, ya que el ave se mostraba inofensiva debido a las graves lesiones que presentaba. "Una de las señoras que estaba aquí cerca nos dijo que tenía una prima que era veterinario y que nos mandaba a decir que la dejáramos ahí no más, porque eran muy infecciosas", agregó el hombre.
Pese a las advertencias hubo locatarios que igual se acercaron a la lechuza. "Me dio pena verla así con su piquito roto. Le intenté dar agua y un poco de semillas, pero no quiso nada. Estaba bien mal la pobre, daba pena verla", relató Jennifer Castillo, otra feriante del lugar.
De acuerdo a lo que se comentó en el recinto, el ave podría haber llegado en el camión proveniente desde Talca y haber pasado toda la noche herida. J
l Frente a los constantes llamados que realizaron los feriantes, el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) de Concepción llegó hasta el tradicional centro comercial a eso del mediodía de ayer, para tomar el ave y trasladarla hasta un recinto especializado para curar sus graves heridas y estabilizarla del gran trauma que vivió durante las últimas horas. "Le pusieron una inyección de algo y se la llevaron", indicó un feriante.