El rugir de los motores y el ruido de los neumáticos aumentan durante la noche, algo que a pesar de ya ser común, siempre vuelve a inquietar y poner tensa a Gladys Díaz. La habitante del sector Leonera de Chiguayante, tiene su casa y un negocio al lado de calle Manuel Rodríguez, justo en el tramo que ella y sus vecinos afirman, se ha transformado en una verdad pista de carreras de autos. No importa el día, según los residentes, la velocidad que alcanzan los autos es algo que les preocupa, al tener tan cerca sus casas de la calle.