A Brasil se le apareció 'San' Memo Ochoa
l Si en el debut a Brasil le bastó la camiseta -y un par de cobros arbitrales- para derrotar a Croacia, ayer en Fortaleza ni eso fue suficiente. Porque al frente se encontró con México. O más bien, con el arquero Guillermo Ochoa. Lo buscó Brasil. Lo busco mucho. Atacó durante gran parte del partido. A ratos lo hizo de forma desordenada. A ratos, también, logró hilvanar jugadas colectivas. Atacó por aire y también por bajo. Agotó, dentro de las limitadas variantes que ofrece Brasil, sus posibilidades. Pero siempre, casi hasta el cansancio, al Scratch se le apareció el 'Memo' Ochoa.
El arquero, que viene de una temporada para el olvido con el AC Ajaccio francés -donde se fue al descenso- evitó dos, tres, hasta cuatro goles claros de los brasileños. Le sacó de la línea un cabezazo a Neymar. Repelió con el pecho un remate a quemarropa de Fred. Y devolvió con los puños un frentazo en plena área chica del capitán Thiago Silva.
Fue, dijo la prensa mexicana, la redención de Ochoa. La resurrección de un arquero que juega en Brasil su primer Mundial como titular. Fue, también, el golpe de un equipo que llegó pensando en no pasar vergüenzas y quedó con un pie en octavos de final. Y sobre el final lo pudo ganar: un remate de Andrés Guardado cerca estuvo de colarse en el ángulo más lejano de Julio César. Fue un cero a cero que en México celebraron como una victoria y a Brasil le dolió como una derrota. 'El equipo mostró solidez defensiva nuevamente. Es un buen punto para nosotros. Nos vamos contentos', dijo Ochoa. Los mexicanos, ahora, buscarán la clasificación ante Croacia, mientras el Scratch definirá todo ante Camerún.
En los otros partidos que completaron la jornada de ayer, Bélgica tuvo una trabajada victoria por 2-1 sobre Argelia, mientras que Rusia y Corea del Sur igualaron 1-1, ambos duelos por el Grupo H. J