Explosión dañó 64 hogares y dejó en riesgo vital a abuelita
El pánico invadió a los vecinos de Lientur tras una onda expansiva que destruyó decenas de ventanales.
l M. Saavedra/A. Neguiman
La onda expansiva que generó una explosión de gas en el Conjunto Habitacional Lientur tuvo un alcance de más de cinco cuadras. Más de sesenta departamentos del condominio resultaron dañados y una abuelita quedó en riesgo vital tras sufrir graves quemaduras. El pánico, la angustia y la tristeza se apoderaron ayer de los vecinos del sector.
El hecho ocurrió cerca de las 10.00 de la mañana y tuvo su origen en un departamento del segundo piso del block A. El inmueble era habitado por Natividad Ocampo (87) quien quedó atrapada y aturdida tras el estallido. Gracias a sus vecinos, pudo salir y ser asistida por equipos de emergencia.
Mario Riquelme, uno de los residentes del conjunto habitacional relató que "la explosión fue enorme. Cuando escuchamos el cuetazo creímos que se había caído un avión. Así que entramos corriendo al departamento que había estallado y apagamos todo lo que se había incendiado. Ahí encontramos a la abuelita y un vecino logró sacarla".
El hombre que rescató a la anciana se llama Renato Riffo. Él contó que "ella estaba muy quemada y había quedado encima de una silla. La tomé en brazos y la saqué hacia la calle".
"Después de que mi departamento se movió como un cajón de manzanas, partí corriendo al bloque A. Con otros vecinos estábamos preocupados por ayudar a los otros abuelitos, así que empezamos a golpear las puertas en otros departamentos, de los que sacamos a algunos niños también", contó otro de los improvisados rescatistas.
Mientras tanto, personal del Cuerpo de Bomberos de Concepción trabajó en la inmovilización de la anciana a la entrada del barrio. Además, los voluntarios controlaron la extinción de los últimos focos de incendio generados por el estallido.
Una gran cantidad de Carabineros ayudó a resguardar el perímetro de los edificios afectados. Gran cantidad de vidrios, ropa y materiales salieron disparados hacia los pasillos entre cada torre, generando un panorama desolador. Al presenciar ese ambiente de destrucción varias dueñas de casa comenzaron a llorar.
Claudia González, una de las afectadas por el hecho, explicó que "salí con mis niños a la calle porque pensamos que mi edificio se iba a caer. No entendíamos qué estaba pasando, porque vibró más fuerte que para el terremoto".
Otras personas, como Nicole Fernández, se preocuparon de sus mascotas. "Tengo dos perritos. Uno se escondió detrás del mueble del televisor y otro comenzó a ladrar en la puerta. A todos nos dio miedo", sostuvo.
Los peritajes se concentraron en el departamento de Natividad Ocampo, en donde se prestó particular atención a un balón de gas de 15 kilos que sería la fuente desde donde emanó el combustible.
El director Regional de la Onemi, Gonzalo Arroyo, indicó que "se trató de una explosión por emanación de gas. Por lo mismo, tomamos contacto con la empresa proveedora del suministro y también se llamó a la superintendencia de Electricidad y Combustibles. Se debe investigar qué es lo que pasa con los cilindros en este lugar, porque la norma establece que no pueden estar dentro de los departamentos".
En este sentido, la gobernadora de la Provincia de Concepción, María Andrea Muñoz, expresó que "hemos revisado en terreno la situación para entender lo que ha pasado. En ese sentido, debemos trabajar con la superintendencia, ya que los edificios cuentan con sello verde pero las personas utilizan cilindros de gas. Ello genera el peligro de que los vecinos enfrenten emergencias como la que estamos viviendo. Se están realizando todas las averiguaciones y gestiones para que esto no vuelva a pasar", subrayó.
El presidente de la junta de vecinos, Miguel Carrillo, indicó que "siempre hemos alegado porque los balones de gas quedan dentro. Siempre tuvimos miedo de que algo así ocurriera y lo que le pasó a la señora para nosotros fue una verdadera bomba de tiempo".
Pese a la gran cantidad de cristales rotos en las casas y en el piso, ninguna otra persona resultó herida. Tampoco hubo más lesionados, pese a que la onda expansiva llegó a doblar los marcos de las ventanas.
Sin estas protecciones en sus casas, los residentes del Conjunto Habitacional Lientur quedaron a la deriva. No obstante, la Municipalidad de Concepción, en horas de la tarde, les hizo entrega de una solución provisoria al respecto. "Nos entregaron náilon para tapar nuestras ventanas. Nos dijeron que era por mientras, ya que después nos repondrán los vidrios", expresó Carolina Pinto.
A pesar de que la medida tranquilizó a la mayoría de la comunidad, hubo un grupo de residentes que no la recibió de buena forma e, incluso, la catalogó como vergonzosa. "Tenemos hijos. Con un pedazo de náilon no se va a detener la entrada de frío a nuestras casas", indicó Pablo Torres.
El vecino añadió que "ni siquiera nos entregaron madera o algo con lo que pudiéramos realizar el marco de las ventanas. Hay vecinos que lo están colocando con pegote".
Otro número importante de residentes tomó la solución en sus manos, comprando algún material con que pudieran capear el frío y la lluvia pronosticada para las próximas semanas. "La solución que nos entregó el municipio es bastante precaria, por lo mismo, compré un pizarreño para colocar en las ventanas de mi casa", puntualizó Miguel Acuña.
Gonzalo Lavín, por su parte, afirmó que "no estaba en mi casa cuando pasó la explosión. En estos momentos, me di cuenta de la magnitud que tuvo la emergencia. Tras los daños, tuve que comprar madera para instalar los náilons. Tengo tres niños y quiero que sigan con buena salud", sostuvo preocupado.
Finalmente, se desarrolló una reunión entre la comunidad y el delegado municipal de Barrio Norte, donde se indicó que durante la jornada de hoy, se entregarán a los afectados 64 canastas familiares.
"Además, nos dijeron que tendríamos una reunión el próximo miércoles 16 con el alcalde Ortiz, donde hablaríamos de posibles soluciones de la estructura de los departamentos, como también el tema de la instalación de los balones de gas en el interior de las viviendas. Esa instancia será una verdadera discusión", señaló la autoridad vecinal.
Por su parte, las ventanas y puertas de las dependencias comunes de los departamentos dañados, no tienen una reparación próxima, según lo indicó el presidente del conjunto habitacional. "Por el momento, nos estamos preocupando de los daños que se produjeron en las casas. Todo lo que sucedió fuera de ellas, tendrá que quedar así", añadió.
Este escenario no resulta grato para los vecinos, ya que anoche expresaron tener además miedo frente a robos o a una posible inundación de las viviendas. J
l Arturo San Martín, director del Hospital Regional de Concepción, indicó que "la señora Natividad está internada con contusiones y quemaduras en el 40% de su cuerpo, las cuales también comprometieron sus vías respiratorias. Ella se encuentra en riesgo vital, especialmente por su edad y otras patologías. Permanece sedada y con ventilación mecánica en la Unidad de Cuidados Intensivos, en donde recibe los tratamientos necesarios".
l Los antecedentes quedaron a disposición del fiscal Andrés Baraona, quien indicó que el balón de gas particular no presentaría fallas producto de su estado, por lo que se investiga una posible manipulación.
Personal de Bomberos y equipos del Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones adoptaron las primeras diligencias dentro del departamento siniestrado. Allí los peritos fijaron y levantaron evidencias, además de tomar las declaraciones correspondientes a los testigos del incidente.
Los datos preliminares fueron entregados a Fiscalía y la investigación del gran estallido sigue en curso. Los copropietarios del Conjunto Habitacional Lientur esperan saber qué fue lo que ocurrió con el fin de evitar que vuelva a suceder.