l Camila Infanta / Agencias
Como una forma de disminuir considerablemente los accidentes, muchos de ellos con resultado de muerte, con vehículos retrocediendo, el departamento de transporte de Estados Unidos emitió esta semana una normativa que exige la instalación de tecnología de cámaras de retrovisión en todos los automóviles nuevos y en muchas camionetas.
La norma emitida por la Administración Nacional de Seguridad en las Carreteras (NHTSA) requerirá que todos los vehículos nuevos de menos de 4.535 kilos y que hayan sido confeccionados a partir del 1 de mayo del 2018, cumplan con las normas de visibilidad trasera. La regla incluye a autobuses y camiones. En tanto, motocicletas y remolques están exentos.
Las cámaras retrovisoras, que pueden ser montadas en diversas partes de la sección trasera del auto, deben ofrecer a los conductores un campo visual de al menos entre 3 a 6 metros directamente detrás del vehículo. El sistema además debe cumplir con otros requerimientos, incluyendo tamaño de la imagen en el panel de instrumentos, condiciones de iluminación y tiempo en pantalla.
Los accidentes en reversa con vehículos ligeros causan un promedio de 210 muertes y 15.000 heridos al año en Estados Unidos, y las víctimas a menudo son niños y ancianos, según dijo el gobierno. Los niños menores de cinco años representan 31% de esas muertes cada año, mientras que los adultos mayores de 70 representan 26%.
De hecho, según la NHTSA esta normativa salvará entre 13 y 15 vidas al año y hasta 1.125 lesiones.
En Estados Unidos, 44% de los modelos de autos del 2012 se vendieron con cámaras retrovisoras, y 27% las tuvieron como opción adicional, de acuerdo con la firma de investigaciones Edmunds. J
l Según informó el Gobierno de EE.UU. se estima que un sistema de cámaras retrovisoras costará entre 132 y 142 dólares por vehículo, es decir, entre $72.000 y $78.000. Para los vehículos que ya tienen una pantalla en el panel, modificarlos para cumplir con la regla 43 dólares, es decir, $23.000.