Ariqueña pasó un gran susto por su gente en el norte
l Cecilia Bastías Jerez
Momentos de nerviosa espera vivió Ivonne Jorquera, directora de la escuela de Tumbes, quien, además de estar preocupada por los niños de su establecimiento educacional, sufrió por algunos momentos por su madre y hermana que viven en la ciudad de Arica, al igual que ella en su primer tiempo de vida.
"Apenas supe lo del terremoto llamé inmediatamente al teléfono de red fija de la casa de mi madre y no contestaba", indicó Ivonne, quien recordó que gracias las instrucciones que ella misma le había dado debido a la seguidilla de temblores que se registraron allá, seguramente su familia estaría evacuando su casa. "Con lo que yo viví acá para el 2010 les dije lo que tenían que llevar en un bolso y todo lo que aprendí por experiencia", destacó.
"Yo llamaba al teléfono mandaba whatsapps, pero a ellos les llegaban los mensajes y a mí no de vuelta", comentó. "Pero seguí insistiendo y al final se restablecieron las comunicaciones y pude saber que estaban bien y que a la casa, aunque es antigua no le había pasado nada", subrayó la educadora, que también vivió la preocupación por los pequeños que asisten a su escuela. "Yo vivo en Concepción, pero estuve llamando a la secretaria y me decía cómo iba todo", señaló.
Ayer, la Presidenta Bachelet recorrió Arica para analizar en terreno los efectos del sismo, al que siguieron numerosas réplicas. J