El microtráfico y delincuencia acaban con la paz de Hualqui
Los vecinos de la comuna están temerosos por aumento de delitos y la escasez de personal policial.
l Cecilia Bastías Jerez
Temor es lo que se vive en la comuna de Hualqui ante los recientes hechos de violencia que han afectado a esta comunidad, acostumbrada a la tranquilidad de la vida cercana a lo rural. Tal es el miedo que ronda en la población, que muchos no se atreven a dar sus nombres a la hora de opinar acerca de la situación que están observando actualmente, lo que da cuenta que este es un sistema de vida al cual los hualquinos no están acostumbrados, y que esperan que el trabajo de la autoridades se encamine hacia recuperar su comuna tal como era antes de que la presencia de drogas y las balaceras, como la que la semana pasada cobró la vida de un hombre de 38 años, se apoderaran de su calmada cotidianeidad.
"Yo le puedo contar por ejemplo que ayer asaltaron la farmacia de la esquina de la plaza, se comenta mucho de robos, incluso a mi casa entraron una vez a robar, yo no estaba", indicó una vecina, quien luego agregó que "ha llegado mucha gente de fuera. En las poblaciones sobre todo pasan más cosas, como balaceras".
Otro transeúnte de la plaza de Hualqui comentó que para él lo más importante es que aumente la presencia de Carabineros en el sector. "Falta más dotación, hace falta más vigilancia porque ha muerto juventud y aparte hay problemas de droga también. Aquí en todos lados está peligroso, no puedo hablar de un sector en particular", indicó. "Nunca había pasado esto que mataran a un joven. Se está perdiendo la tranquilidad, yo llevo 16 años aquí, antes era muy seguro, salíamos en las noches con la familia, eso cambió mucho", añadió, recordando la muerte de un muchacho de 17 años que fue apuñalado a principio del mes.
Otra residente, que también prefirió dejar su nombre en reserva, manifestó que la mayor preocupación en el lugar es lo que está ocurriendo con la juventud, ya que es ahí donde observa la mayor incidencia de problemas de drogas que finalmente son los que llevarían a cometer estos actos de violencia. "Las poblaciones nuevas son las que han traído estos problemas, porque aquí, antes de que llegaran, la vida era tranquila", afirmó.
El miércoles, justamente, en la farmacia ubicada al frente de la plaza de Hualqui, tal como comentó una vecina, extraños ingresaron durante la noche al local de ventas y robaron un millón de pesos en efectivo.
Y en el momento en que La Estrella se encontraba en la comuna, dos carabineros acudieron al sector de San Onofre, al llamado de unos vecinos que denunciaron haber visto un hombre joven merodeando una casa.
A esto se suman los dos fatales episodios registrados en lo que va del año: la muerte el sábado 1 de febrero de Matías Betancurt, de 17 años, quien fue acuchillado; y el asesinato el 12 de febrero de Nicolás Carrasco, de 38 años, quien fue encontrado con disparos en su cuerpo.
Para Carmen Orellana, dirigenta vecinal del sector Rucalhue, donde ocurrió el último hecho de violencia, esta posición tampoco es nada de fácil porque siente mucho temor a la hora de tener que trabajar por su comunidad, ya que en muchos casos son criticados y mal vistos por los propios antisociales.
"En este último tiempo se ha dado, cosa que yo lamento, que la gente se esconde cuando hay balacera y después salen como si nada. Se están habituando, ya para ellos es un hecho común", comentó.
Para esta dirigenta, la escasa dotación de Carabineros es lejos el problema más urgente para la comuna. "Ha crecido demasiado la población y no aumenta la presencia de policías. Nosotros a veces los hemos llamado por algún problema y hay oportunidades que ni siquiera llegan. O a veces hacen rondas con sus balizas encendidas, pero así alertan a los delincuentes de su presencia", analizó.
Para la presidenta de la Junta de Vecinos, la teoría de que las personas que han sido trasladadas hacia la comuna serían las que provocarían en su mayoría actos delictuales, no le resulta descabellada, realizando una comparación entre los años en que ella ha vivido en la comuna con el cambio que se produjo desde que comenzaron a llegar estas erradicaciones.
La dirigenta detalló incluso que consideran que ya están siendo estigmatizados como una población de riesgo. Sin embargo, para ella esta situación trasciende cualquier territorio y tiene que ver con una problemática más bien de sociedad, cuya muestra es la existencia del microtráfico.
Para el edil hualquino, Ricardo Fuentes, la problemática más grave que se está viviendo en su comuna es el tráfico de drogas. Y su raíz, en gran medida estaría en el traslado de familias a viviendas sociales que provenían de otras comunas. "Yo le dije al director del Serviu en su momento, el 2008, le anticipé los problemas que íbamos a tener", afirmó el edil.
Sin embargo y frente a la situación actual de la comuna, el alcalde señaló que no se trata de estigmatizarla como un lugar inseguro. Lo que ocurre es que la falta de costumbre de sus habitantes ante hechos delictuales, es lo que ocasiona la preocupación y el miedo.
"Nosotros hemos dicho que queremos que esta comuna progrese, pero con alma de pueblo y en ese sentido la gente se siente preocupada, se sienten atemorizados, no estamos acostumbrados a vivir esto", aseguró. Por ello está tomando contacto con las autoridades policiales para procurar un aumento en la dotación en la comuna que sea permanente. J
l La coordinadora de Senda Previene en la comuna, desde la labor de prevención que esta institución realiza, han podido detectar el aumento de la presencia de drogas. "Se nota en el comportamiento de la comunidad a través de su preocupación, ha aumentado la consulta de dónde asistir para el tratamiento de la adicción por pasta base", señaló y agregó "esto es una opinión personal, en la cual se ha hecho hincapié, el tema de la dotación policial en la comuna es crítico".