Pese a mayor seguridad, situación se sigue viendo en algunos sectores.
l Andrea Neguiman Pozo
Pese a las constantes denuncias que los vecinos del sector Jorge Washington, en Concepción, han realizado sobre los graves excesos que se desarrollarían en las cercanías de locales nocturnos, ubicados entre las calles Rengo con Argentina, la situación no mejora, incluso, teniendo en el área más presencia policial.
Así lo indicó la presidenta de la junta de vecinos del sector, Cristina Poblete, quien añadió que "lo único que cambió es el tema del sexo explícito en la vía pública, ya que ahora se ve más en Lincoyán, debido a que los dueños de los pubs colocaron más guardias de seguridad en las afueras de los recintos, así que al parecer, a los cabros les dio un poco de pudor que los vieran en plena acción".
De igual manera la dirigenta vecinal expresó a La Estrella que el nuevo "nidito de amor" utilizado por los jóvenes es un escenario propicio para que se produzcan otras situaciones ilícitas, ya que la calle no cuenta con salida vehicular y posee poca iluminación. "Además de encontrar un centenar de condones usados colgados en los árboles o tirados en la puerta de las casa, en ocasiones los cabros se pasan más de listos bebiendo alcohol ahí mismo, por ende, se desarrollan peleas, asaltos, entre otras situaciones desagradables para los vecinos", puntualizó la dirigenta.
Una situación parecida dicen vivir algunos de los vecinos de plaza Condell, también en Concepción, quienes están preocupados por el inicio de las clases, instancia que traería consigo la presencia masiva de jóvenes que harían del espacio público un lugar no apto para los niños. "Los universitarios vienen y se tiran en el pasto a darse besos y a hacer otras cosas. Quizás piensan que están en sus casas, porque de repente se están tocando sus partes íntimas y da vergüenza mirarlos", expresó Teresa Novoa. La mujer, asimismo, añadió que "no tienen prudencia ni siquiera con los pequeños cuando andan jugando a su alrededor".
Otra de las preocupaciones que afecta a los residentes es la delincuencia que también aumentaría en esta época, ya que muchos estudiantes a veces descuidan sus cosas, sostuvo, tentando así a los delincuentes. "Las jóvenes siempre andan despistadas hablando por teléfono y por eso les quitan los celulares. Es que los tipos se esconden y ni siquiera se ven por la poca luminosidad", expresó Lina. J