l Cecilia Bastías Jerez

La naturaleza está dando cuenta de un desequilibrio. Y es que los últimos hechos ocurridos en las costas de la Región del Bío Bío, con diversos hallazgos de especies marinas muertas, es un signo de que algo importante que está ocurriendo en el entorno. Así lo han denunciado en reiteradas ocasiones, por ejemplo, pescadores artesanales y algueras de la caleta Lo Rojas, quienes cada vez que se encuentran con una varamiento, apuntan a la presencia de las termoeléctricas.

Sin embargo en el último año han ocurrido al menos siete episodios de tristes hallazgos de fauna marina muerta en la orilla de la playa. Y aunque no se pueden relacionar todos entre sí directamente, de acuerdo a la visión ecologista sí tendría que ver con la forma en que se está interviniendo la naturaleza.

El consejero regional electo y líder ecologista, Félix González, quien estuvo presente en la playa de Colcura el reciente martes luego de que se encontrara unas masiva cantidad de patos yecos muertos, indicó que considera que aunque la explicación de todos los fenómenos parecidos en el último tiempo no tienen una conexión directa, sí se debe en gran parte a la acción del ser humano sobre el ecosistema.

"Se están perdiendo los equilibrios, incluso los temas de los virus y la enfermedades también tienen que ver con situaciones climatológicas. A veces los ecosistemas se enferman porque faltan algunos nutrientes", indicó González quien también es investigador en temas medioambientales de la Universidad de Concepción.

El reciente encuentro de patos yecos muertos en la orilla de la playa de Colcura en Lota, así como en Tubul, abrió paso a las dudas respecto de qué es lo que está ocurriendo con las especies marinas en la zona, ya que hace tan sólo un par de semanas, el 30 de enero, en la caleta Lo Rojas varó un gran número de sardinas.

A esto se le suma la existencia de una varazón similar que además de sardinas incluía cangrejos en las playa de Tomé.

Y si se continúa con el listado hacia atrás en el tiempo, es fácil detectar que existe cierta constancia en la ocurrencia de estos fenómenos.

Hace menos de un año, en junio de 2013, se registró el varamiento de langostinos juveniles. Una masa de color claro se apoderó de la playa Boca Maule, en Coronel, cubriendo cerca de 2,5 kilómetros de superficie. En cuanto a las posibles causas que se esgrimieron en la oportunidad, estuvo la del sistema frontal que afectó a la región en ese entonces, lo que provocó gran movimiento en las corrientes marinas que pudo haber arrastrado a la playa a esta especie, cuyo hábitat se encuentra a 30 millas al interior del mar hasta las costas.

En caleta Lo Rojas, también en Coronel, en abril del año pasado se encontraron también millones de langostinos varados en la caleta, los que según vecinos estaban cerca del desagüe de las termoeléctricas, situación que llevó a que la fiscal ordenara a la PDI investigar sobre las causas de estas muertes. En dicha ocasión, la investigación determinó que existía una falencia tecnológica en una de las centrales, lo que habría incidido en la varazón.

Respecto de estos episodios, la concejala de Lota Tamara Concha afirmó que en conversaciones con los pescadores, estas situaciones se explicarían por la polución de empresas en la zona. "Es producto de la contaminación lo que estamos viviendo", aseguró. Por ello, la concejala lotina anunció acciones legales para descubrir a los posibles responsables de lo ocurrido esta semana en el playa de Colcura con los patos yecos o cormoranes.

Sin embargo, el ecologista Félix González aclaró que estos episodios no son por causas iguales. "Hay que hacer algunas diferencias, son por distintos fenómenos", señaló. Para el representante ecologista, el cambio climático también es una posible causa de las constantes presencias de fauna marina muerta en la orilla del océano.

Por su parte, la bióloga marina Pamela Muñoz indicó que las causas de cada uno de estos episodios tienen que ser evaluadas de forma individual. Pero para la profesional existe la posibilidad que estos eventos puedan ser explicados por los cambios en la temperatura del agua. Aunque existen muchas variables a ser analizadas, aseguró.

"La salinidad, el PH, el color del agua influye en la profundidad que llegan lo rayos del sol, el fitoplancton", explica la especialista, quien de todas maneras afirma que la frecuencia de las varazones que se han registrado en la zona no es normal. J

l En agosto del 2013, vararon diez cachalotes en la Isla Mocha de Lebu. Entre las teorías que se barajaron en este entonces para explicar este evento estuvo la influencia de los cambios en las condiciones meteorológicas en la región. En esa oportunidad los pescadores de la zona intentaron devolver a estos especímenes al mar, pero fue imposible debido a su tamaño.

lFélix González explicó respecto del caso de los pájaros encontrados muertos en Lota, que existen sospechas de la presencia de un virus. "En el último mes han estado varando exclusivamente patos yecos y eso nos hace pensar que hay algún virus que esta atacando a estas aves en particular". Sin el afán de ser alarmista, este miembro del Partido Ecologista comentó que esta situación se debe descartar mediante exámenes porque de ser así podría significar riesgo para los humanos.