Pablo Martínez Tizka
El primer domingo sin garita de vigilancia ni barrera de control en Pingueral alentó a varias familias a conocer esta playa por primera vez, por lo que llegaron desde temprano al sector en Tomé. El pasado lunes, el Ministerio de Bienes Nacionales declaró el lugar como "de libre acceso", por lo que una maquinaria del organismo destruyó la garita que resguardaba el acceso.
Las familias destacaron lo cristalino de las aguas y la calidad de sus arenas. Llamaron a cuidar el entorno y, al mismo tiempo, valoraron la posibilidad de ingresar al sector.
Víctor Díaz vive en la población Libertad de Talcahuano y fue una de las personas que pudo visitar la playa Pingueral por primera vez.
"Lo intentamos con mi esposa hace un tiempo atrás, pero el portero no nos dejó ingresar. Es espectacular lo que estoy viendo. Sólo queríamos turistear un rato y nos llevamos una gran impresión. Estamos pasando un rato agradable. Es importante que entre todos cuidemos esta zona", señaló.
Víctor Morales, de la población Lomas Coloradas de San Pedro de la Paz, llegó con su familia. "No nos dejaban entrar porque decían que era un lugar solo para residentes. Vine con mi esposa y con mis dos niños. Me llama la atención la pureza y la coloración de la playa, lo tranquilo del sector, el oleaje y una vista hermosa. Es paradisíaco si lo comparamos a otros puntos de la región", dijo.
Julia Mendoza, de Las Salinas de Talcahuano, dijo que "no sé cómo este sector estaba prohibido. Es primera vez que estoy aquí y es hermoso. Me alegro que cualquier persona pueda ver este precioso lugar. Después de disfrutar aquí, iremos a Dichato".
Quien no vino por primera vez es Carolina Venegas, quien es oriunda de Talca. Señaló que "las playas públicas son para que todos los chilenos disfruten. Cuando estaba la garita, nos pedían la identificación y nos dejaron pasar a mí y a mi marido, pero atrás le rechazaron la entrada a las personas que llegaron caminando. Eso me pareció discriminador".
Visitantes recurrentes
Juan Manuel Casanueva y Marianne Book son visitantes recurrentes de Pingueral y llegaron caminando desde Dichato para visitar a una familiar que es propietaria.
Casanueva señaló que "se ha notado el aumento de personas. Te diría que a nosotros nos ha facilitado la entrada y no nos afecta en absoluto. A los propietarios les puede hacer algún ruido, pero eso lo tienen que ver ellos. Mientras se conviva en forma sana, no se debiera provocar ningún conflicto".
Marianne Book agregó que "a pesar de que no está la garita, hay guardias más adentro y nos preguntaron por temas de seguridad. Nos parece justo que se abra la playa".
Seguridad
Iván Lagos es vecino del sector y señaló que "han pasado varios percances desde que se tomó esa medida. Nuestras propiedades están sin cerco y hay inquietud. Estamos guardando todo. No nos sentimos seguros".
Lagos aclaro que "no estoy en contra de que la gente circule libremente, incluso cuando visito la casa traigo a personas, pero estamos preocupados por lo que vaya a pasar con la delincuencia".
Finalmente, el propietario señaló que hoy habrá una reunión entre propietarios para determinar los pasos a seguir.
"Me llamó la atención la pureza de la playa, lo tranquilo del sector y una vista hermosa".
Víctor Morales