Jorge Jara, corre con traqueostomía: "Es un gran desafío"
Varias fotos tuvo que regalar Jorge Jara Cerda (62), pues su presencia en la ruta no pasó desapercibida para el resto de los runner. Y cómo no, si es el único en Chile en atreverse a correr con una traqueostomía, cuyo "tubito" pegado al cuello lo identifica en cada lugar donde se viste de runner. "Esta vez voy sólo, tranquila que voy a llegar", le decía Jorge a su esposa, Yasna Pino, quien por un resfrío esta vez no pudo correr a su lado.
Nerviosa ella, se puso a esperar a Jorge en la meta, donde al cabo de una media hora, él hizo el arribo lleno de energía.
"El 2013 un virus llamado Guillain Barré le atacó su médula espinal, lo dejó seis meses en la UCI y cuadripléjico. Luego vino su evolución, con ayuda médica, de Dios y de toda la comunidad. Estuvo muchos meses conectado a ventilador mecánico y eso lo dejó con la traqueostomía permanente. Es la única persona en el mundo que corre con una traqueostomía", contó emocionada Yasna.
"Él siempre fue deportista, y dijo, una vez que me pare de esta silla de rueda, voy a seguir corriendo. Y aquí lo vemos, su meta es correr los 21k, se está preparando para eso", agregó la profe de Ed. Física.
Rubén Roldán, runner no vidente: "Fue una linda experiencia"
La ausencia de su compañero guía estaba dejando a Rubén Roldán sin poder participar. Pero algo quería que él atravesara la meta sí o sí. Y ese algo le puso por delante a Manuel "Mañungo" Figueroa, quien se ofreció para que corrieran juntos los 5k y no se perdiera la fiesta runner. Consiguieron un lazo y a la pista a correr.
Así se conocieron ayer el joven no vidente y Manuel (52), para correr juntos, sin siquiera pensarlo. "Fue una linda experiencia, mi guía no estaba y me iba a quedar sin correr. Pero se acercó y corrimos juntos. Muy agradecido, no pensaba correr con otra persona, así que feliz", contó un extenuado Rubén, con su medalla al cuello.
"Yo también tengo una hija que es especial (con Síndrome de Down), entonces uno sabe como es esto. Feliz de haberlo acompañado, y ya quedamos contactados para las próximas corridas", apuntó el inesperado atleta guía.
Feliz también quedó su madre, María Araya, su papá Juan Torres, y el hermano menor, Juan Pablo. "Él nació con un tumor cerebral, las quimioterapias le hicieron perder la visión, pero acá está, corriendo, sano y feliz", dijo la mamá.