Fotógrafos explican en qué consisten sus poco comunes pegas
Penquistas especializados cuentan en qué se diferencian sus disciplinas de la fotografía tradicional y dónde desarrollan sus actividades profesionales.
"A nivel mundial, la fotografía está yendo hacia un campo de mega especialización", cuenta Gonzalo Cruzat, fotógrafo biomédico titulado en Estados Unidos y que, en ese campo, se dedica a la fotografía oftalmológica.
Eso sí, aclara, "en Chile es muy poca la gente que se mete en un tema y llega hasta la médula de la especialización fotográfica, pero afuera hay gente aprovechando el desarrollo fotográfico y tecnológico para hacer cosas muy interesantes".
Gonzalo, chillanejo de nacimiento y penquista por adopción, se fue a vivir a los 18 años a Estados Unidos, donde tuvo la posibilidad de estudiar fotografía y, a sugerencia de uno de sus profesores, posteriormente especializarse en el área médica.
Especialización
"Estudié en Chicago, y con uno de mis profes hicimos un proyecto que tenía que ver con hospitales, y él me insinuó que yo podía especializarme en esa área", contó. En su caso, se hizo experto en fotografía ginecoobstétrica en Suecia y en fotografía oftalmológica en Miami.
Sin embargo, de vuelta en Chile a mediados de los '80, rápidamente se dio cuenta que no tendría posibilidades de desarrollar su actividad plenamente, porque las posibilidades, aún hoy, son escasas.
"La fotografía médica se hace con tres objetivos: uno es la diagnosis, otro es la investigación y finalmente la docencia", explica Cruzat, quien sin embargo, matiza su especialidad con otro tipo de registros, como el industrial.
"Hoy en día yo dedico sólo un día a la semana para hacer fotografías de fondo de ojos y angiografías. Para eso ocupo una cámara retinal. El resto del tiempo me dedico a otro tipo, como la fotografía industrial y publicitaria".
Según cuenta Cruzat, hay muchas funciones de la fotografía biomédica que en Chile las cumplen profesionales de otras áreas. "Por ejemplo en el área oftalmológica la hacen los tecnólogos médicos, como las angiografías o fotografías de células epiteliales"
Incluso, algunas imágenes que en otros países son fundamentales para un correcto control de enfermedades que afectan a los ojos, en Chile ni siquiera se hacen. "En otros países, donde se hacen controles más rigurosos, los pacientes de diabetes tienen que controlarse la retina de los ojos por lo menos tres veces al año. Eso acá no ocurre", señala.
Alternativas laborales
Como todos los profesionales del rubro, Cruzat debió ir, poco a poco, adaptándose a la transición de lo análogo a lo digital. "He tratado de irme poniendo al día con la técnica, después de la aparición de lo digital, porque yo partí con película", indica.
No obstante, aún disfruta el usar cámaras análogas y rollo para sus proyectos personales. "Cuando iPhone anuncia un nuevo teléfono que permite sacar fotos de calidad profesional, se pierde el sentido académico, la estética y la conceptualidad de la fotografía se ha ido perdiendo con la masificación de la fotografía digital".
Fijar un sitio del suceso
El perito del laboratorio de Criminalística de la PDI, Rodrigo Figueroa Olivares, explica que la función de la fotografía criminalística es ser una herramienta de apoyo a la labor policial.
"Las cosas se dan una sola vez, después se alteran y nada se repite de igual manera en el tiempo. El mismo principio se aplica a los sitios del suceso", detalla Figueroa, que con 22 años en la PDI es el perito fotográfico más experimentado de Concepción.
Para evitar que la información que deja un sitio del suceso se pierda u olvide es que los fotógrafos criminalísticos son los primeros en entrar al sitio de un suceso, después del detective que está a cargo de la investigación.
Gracias a la experiencia de años, los peritos saben qué cosas "fijar fotográficamente", aún así, pueden haber peticiones especiales dependiendo de las características del hecho que haya ocurrido.
"Por ejemplo, el colega que va a cargo de la investigación de la BH entra y se hace una idea de lo que allí pasó. Después de eso, nos dan una descripción y nos dicen qué hay que fijar, aparte de lo que ya está establecido".
Fotos con información
Los peritos fotográficos salen a prácticamente todos los llamados que reciben en la PDI, cubriendo todo tipo de delitos. "No se concibe una buena investigación sin la fijación fotográfica", explica Figueroa.
"Una imagen contiene mucha información y ese es el valor de la fotografía forense, más que valores estéticos. No buscamos que la foto se vea bonita, el objetivo nuestro es un registro, que la fotografía sea objetiva, que muestre lo que es".
El actuar del perito debe ser rápido, para evitar cambios en el lugar donde ocurrió el delito. "Si hay un elemento que aparece en una fotografía y después en otra no aparece o no está igual, eso es un problema de lógica que ante los ojos de un buen defensor, se nota".
En un crimen simple, como un hurto, la cantidad de fotografía puede ser de entre 20 y 25 imágenes, pero ese número crece de manera proporcional a la complejidad de los hechos que se investigan.
Figueroa asegura que la cantidad es relativa. "Un homicidio en un sitio complicado puede significar unas 150 fotografías sólo en el informe, pero a lo mejor son más, porque uno saca hartas y después elige la que mejor represente el sitio".
Después, las imágenes se archivan de acuerdo a un protocolo que clasifica las fotografías por fecha y número de concurrencia del perito a cargo. "Se guarda con un respaldo que tiene cada perito, acá todo se guarda, no se puede perder nada".
Imágenes subacuáticas
En 1994, Humberto Sanhueza y algunos colegas buzos hicieron una limpieza de demostración en la Laguna Redonda, y algo llamó la atención del ex uniformado y buzo.
"Entre 8 personas limpiamos la laguna y sacamos dos camionadas de plantas subacuáticas. Eso me llamó la atención y vi que había un potencial para desarrollar ahí", cuenta Humberto, que con los años se fue especializando en la limpieza de lagunas: "Soy el primero y, aparentemente, el único que se dedica a eso en la zona".
Como parte de las labores que desempeña, de a poco se fue interesando en la fotografía y videos subacuáticos, los que usa para mostrar el antes y después de las limpiezas, así como para ir dejando un registro de lo que va encontrando bajo la superficie.
"He sacado mucha basura, la gente no tiene conciencia ecológica de las lagunas", lamenta Sanhueza, que actualmente presta servicios para mantener las lagunas de Concepción, pero que además atiende espejos de agua en Arauco y en Ñuble.
"He encontrado una pistola de fogueo, refrigeradores, cocinas, lavadoras, televisores, pero lo más extraño fue un auto con dos cajas fuertes, en la Laguna Redonda, en 2014", relata.
El recuerdo es un poco amargo, porque en esa oportunidad "mi cámara se echó a perder y hasta el día de hoy nadie me ha respondido".
Actualmente, ocupa una cámara "que tiene muy buena definición, se puede tomar fotografía y video, para mi registro personal".
"Nuestra labor es la fijación fotográfica del sitio del suceso, porque las cosas se dan una sola vez".
Rodrigo Figueroa,, perito criminalístico PDI"
"A nivel mundial, la fotografía está yendo hacia un campo de mega especialización".
Gonzalo Cruzat,, fotógrafo biomédico"
"He encontrado una pistola de fogueo, refrigeradores, cocinas, lavadoras"
Humberto Sanhueza,, fotógrafo subacuático"
2 cajas fuertes encontró Humberto Sanhueza cuando tomaba fotos en la Laguna Redonda.
150 fotografías puede contener el informe de un perito fotográfico criminalístico.