Alfonso Levet G.
Acompañados por vecinos de la población René Schneider, y también por amigos del club Villa Palito, los familiares de Víctor Hugo Salazar Rebolledo se reunieron para recordar y despedir al querido trabajador, fallecido mientras trabajaba en la clínica Sanatorio Alemán cuando se produjo la explosión.
El velatorio se realizó de manera ininterrumpida día y noche en la iglesia evangélica Nueva Jerusalén, para que todo el que quisiera participar del último adiós, pudiera hacerlo.
Su hermano mayor, Esteban, dijo que Víctor Hugo era un hombre de fe, y que aunque el último tiempo no participaba tan activamente como cuando era pastor, nunca perdió el contacto con los hermanos de la congregación.
"Era muy querido por los hermanos, y el apoyo de ellos ha sido fundamental estos días", contó Esteban, quien agradeció también a la gente del Villa Palito, quienes llevaron lienzos y banderas para despedir a Víctor Hugo.
Jugador de villa palito
Y es que el trabajador era también futbolista del club del barrio, donde vestía la camiseta número 8 de la categoría seniors y por su destreza con el balón era conocido como el "Merello", en honor al recordado jugador de Lota Schwager y Naval.
Víctor Hugo, que estaba casado y tenía dos hijos, era muy amigo de Rodrigo Alejandro Bastidas Sáez, el otro fallecido durante la tragedia del Sanatorio y con quien trabajaba al momento del accidente.
"La gente decía que eran como hermanos", cuenta Esteban Salazar, y relata que ambos se conocieron en la época del liceo, donde forjaron una amistad que los llevó a trabajar juntos.
Bastidas fue velado en casa de sus padres, a pocos metros de la iglesia evengélica donde despidieron a su amigo Víctor, "las familias nos conocemos de toda la vida, y ellos compartieron varios momentos juntos", contó Esteban.
Los funerales de Víctor Hugo se realizarán hoy en el Cementerio Municipal de Chiguayante, luego de un servicio religioso a las 12.30 horas en la iglesia evangélica, ubicada en las calles Cunco con Puerto Saavedra, de la población René Schneider.
"Eran muy amigos (con Rodrigo Bastidas), siempre trabajaban juntos".
Esteban Salazar, hermano"
43 años, tenía Víctor Hugo Salazar. Rodrigo Bastidas Sáez tenía 33. Se conocían desde chicos.