Alfonso Levet
"Nosotros sacamos agua desde una puntera que tiene 18 metros de profundidad, pero además tiramos una manguera de 300 metros desde la casa de nuestros parientes", contó Lorena Fonseca, quien vive junto a su marido y un hijo en la localidad de Curamávida.
En dicho sector de la comuna de Florida el agua tiene un valor especial, ya que no sólo la ocupan para sus necesidades domésticas, sino que también para regarlas chacra y siembras que les permiten abastecerse de alimentos.
Necesidad familiar
Lorena señala que el cultivo es para surtir a la familia, "se ha complicado harto con la sequía, porque vivimos en los cerros, entonces el agua sale a más profundidad".
Si bien hay un camión aljibe que pasa todos los martes por esa localidad, las 80 familias que viven en las inmediaciones están esperanzadas en que se pueda concretar un sistema de agua potable rural, que les permitiría mejor cantidad y calidad en el suministro.
"Estamos en un proyecto para que nos instalen un sistema para todas las familias, pero llevamos hartos años ya esperando", aseguró la vecina, quien, sin embargo, desconoce en qué etapa está el proyecto, "lo último que hicieron fue que sondearon desde dónde iban a sacar agua potable".
Camiones surtidores
Por otro lado, alcalde de Santa Juana, Ángel Castro, dijo que en esa comuna "tenemos 300 familias que están con problemas de agua y se les está entregando el vital elemento con camiones aljibes. Eso significa que hay que hacer recorridos por sectores rurales para hacer llegar agua a esas familias".
Actualmente son seis los camiones que reparten el líquido continuamente por las 25 localidades que requieren del servicio, las que en su mayoría están distantes unas de otras y, además, en zonas de difícil acceso.
Las iniciativas que se están desarrollando en la comuna se encuentran en distintas etapas. "Tenemos proyectos que ya tienen tres años, pero faltan recursos para poder hacer la etapa de diseño de ingeniería y para después construir la obra podrían pasar mínimo dos años más", explicó el alcalde.
Realidad regional
Castro, que además es presidente de la Asociación de Municipalidades del Biobío, dijo que "es algo que se da en toda la región, en lugares donde hay mucha necesidad producto de la sequía".
Señaló que en todo el Biobío se están desarrollando iniciativas para implementar los sistemas de agua potable rural. "Hay varios proyectos grandes, que son muy buenos, pero quizás los tiempos son muy largos y se requieren de mayores recursos para acelerar esos procesos".
"Es necesario que las autoridades que asuman el problema de la sequía, puedan destinar más recursos y acortar los tiempos de tramitación de los proyectos, que son muy largos", precisó.
