Kramer no usará muela: "Prefiero ir a los leones"
El humorista e imitador resolvió mantener la decisión de subir al escenario de Viña sin recibir datos de su equipo sobre si su show va bien o mal.
Diez años después de su debut en el Festival de Viña, Stefan Kramer volverá a la Quinta Vergara. Si en su participación anterior el imitador llegó a consolidar una robusta carrera en la televisión abierta, esta noche se espera haga gala de los logros conseguidos a nivel internacional.
Así lo entiende el propio Kramer, que en la rutina de esta jornada, marcada por la música anglo, presentará "Súper Papá", monólogo que habla sobre sus viajes a Miami, Estados Unidos, de la mano de Don Francisco y, por otra parte, del nacimiento de su cuarto hijo.
"Mi apuesta está en ese espectáculo y en una historia que, de principio a fin, dura alrededor de 45 minutos y mis bis. Estoy contento, concentrado, con muchas ganas de disfrutar", dijo ayer en la previa de su regreso al certamen.
El show de Kramer ocurrirá tras la, por momentos, difícil presentación de Bombo Fica, que incluso fue pifiado durante el baile de Mariela Montero. "Creo que la gente quizás prefería haber visto más al Bombo", opinó el comediante.
Kramer, sin embargo, dijo que esto no lo hará revisar la decisión de no usar sonopronter o "muela", para recibir información externa. Kramer puntualizó que sólo utilizará un audífono para controlar su voz y recibir instrucciones de ubicación en el escenario: "La verdad, prefiero ir a los leones. Pase lo que pase, está tu alma para defenderte y para reaccionar. A veces sirve (la muela), porque te pueden decir 'estás parado dos pasos, camina más adelante, la luz se te perdió' y tú obedeces y caminas. En ese aspecto, tener una orden para algo no me parece tan mal. De hecho, voy a tener a mi gente ahí y, si pasa algo, me irán a decir".
La rutina de hoy
Sobre su rutina, afirmó que "me he preparado hace mucho tiempo con un show que he tenido la posibilidad de hacer en muchos festivales y con todo tipo de públicos, masivos y con menos gente".
"Después de cada presentación soy súper de sacar un poco el ripio, la grasa, que la risa no esté tan lejana. Trato de hacer una mezcla de lo que quiero hacer con lo que la gente espera", afirmó.
Respecto de las diferencias entre el show de hoy y el de hace una década, Kramer dijo que "hace 10 años había una novedad diferente, eran otros tiempos, yo pasaba de un personaje a otro. Lo que podría uno decir es el contacto directo con la gente, ese feedback de nunca dejar de contar la historia. Los tiempos cambian y uno va madurando, tengo más hijos, tengo otra forma de reflexionar la vida. Trato de no apegarme mucho al pasado".
"Mi apuesta está en ese espectáculo y en una historia que, de principio a fin, dura alrededor de 45 minutos"
Stefan Kramer"