Priscilla Barrea Ll.
Más tiempo del que estaba programado, dos horas con 20 minutos, duró anoche el primer debate presidencial que reunió a los ocho candidatos a La Moneda: José Antonio Kast, Sebastián Piñera, Carolina Goic, Alejandro Guillier, Beatriz Sánchez, Marco Enríquez-Ominami, Eduardo Artés y Alejandro Navarro.
La instancia, organizada por la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) y que tuvo lugar en el Congreso, en Valparaíso, no estuvo exenta de polémicas y sirvió para que los presidenciables plantearan sus posiciones frente a temas de contingencia, como el conflicto en La Araucanía, la regionalización, el financiamiento ilegal de las campañas políticas y cómo enfrentarán una segunda vuelta, entre otros.
Ubicados de acuerdo al orden en que aparecerán en la papeleta, los ocho se instalaron tras sus podios y de frente al público.
Tras un saludo del presidente de la ANP, Ricardo Hepp, el periodista Iván Valenzuela dio paso a las preguntas que fueron sorteadas previamente y que estuvieron a cargo de cuatro periodistas de la ANP.
La primera pregunta fue para MEO, a quien se consultó si tenía evidencia para demostrar su inocencia por ser el primer "candidato formalizado", a lo que respondió insistiendo en su inocencia y planteando que en "un año estaré aquí totalmente inocentado".
No dejó de llamar la atención la barra que tuvieron durante el desarrollo del debate, especialmente Enríquez-Ominami con un intercambio permanente de miradas con su esposa, Karen Doggenweiler, a la que incluso piropeó a propósito de una eventual cuarta candidatura si en ésta no resulta electo.
Otros con barra "bulliciosa" fueron Beatriz Sánchez, quien planteó un país más feliz, y Eduardo Artés, quien no comprometió apoyos incondicionales ante una segunda vuelta y reiteró su idea de "refundar Chile".
Conflicto mapuche
El conflicto mapuche tampoco estuvo ausente y fue utilizado como plataforma para marcar posiciones y diferencias. Mientras Sánchez, Artés y Navarro expresaron su abierto rechazo a la Ley Antiterrorista, Kast planteó su postura de no dialogar con "terroristas", mientras que Piñera sostuvo que no sólo aplicará esta ley, sino que "la vamos a reformar para que sea más eficaz".
Los más interpelados fueron el propio Piñera, permanentemente apuntado por MEO a propósito de los dichos de Loreto Letelier y el Caso Quemados; además de Guiller y Kast, situación que dejó una sensación de menor tiempo para el resto de los candidatos. Sin embargo, fue solo a propósito de estas interpelaciones, pues todos respondieron igual cantidad de preguntas a lo largo del debate.
A pesar de los abucheos finales y que interrumpieron su "minuto" antes del término del debate, el más "irreverente" fue José Antonio Kast, quien no sólo fustigó a sus contendores que defienden la causa mapuche, sino también interpeló a Piñera para pasar juntos a segunda vuelta.
La elección de intendentes, el megapuerto, los inmigrantes fueron también parte del debate, que concluyó a las 21.40 horas.
2 horas con dos minutos duró el debate de la ANP, que fue transmitido por UCV.