Camila Espinoza López
Se acerca la primavera y con ésta también comienzan a aparecer los molestos parásitos que complican a los animales domésticos. Con el aumento de la temperatura, pulgas y garrapatas empienzan a atacar con más fuerza a las mascotas.
Ante esto los expertos recomiendan una desparasitación externa, al menos un mes antes del inicio de la temporada de pulgas, para controlar con mayor seguridad la aparición de huevos. "Además es importante el control ambiental con algún producto de dilución que nos pueda cubrir esa parte", dice Milena Koscica, representante de Tiendapet.cl.
Añade que existen diferentes productos para combatir estos parásitos, como repelentes en spray, de aplicación con una pipeta o pastillas que prometen acabar con ellos.
Lo importante, a juicio de Koscica, es "fijarse en la duración del efecto de cada antiparasitario, así podemos tener un control con respecto a cada cuanto tiempo llevar a nuestra mascota a desparasitarse o bien comprar el producto en las fechas adecuadas".
Otro factor a considerar es si el producto combate los estados adultos y larvarios del parásito, para asegurarnos de cortar completamente el ciclo.
En algunos casos, los dueños optan por aquellos productos que resulten más convenientes para el bolsillo, pero hay que tener ojo al realizar la elección.
"Existen muchos productos que son comercializados en ferias libres o por la web e, incluso, 'remedios caseros' que pueden resultar altamente tóxicos y perjudiciales para nuestras mascotas, por lo que es aconsejable siempre comprar productos certificados y de procedencia confiable", dice Koscica.
Preocuparse
Francisca Montero, veterinaria de Royal Canin, recalca que los dueños deben preocuparse de cuidar a sus mascotas de estos parásitos que pueden provocarles diferentes molestias. "La picadura de la pulga supone una mínima pérdida de sangre, pero lo importante es la transmisión de muchas enfermedades", comenta.
Respecto de las estrategias para eliminar a las pulgas, "los laboratorios han desarrollado diferentes productos sanitarios que las eliminan del gato o el perro. Sin embargo, la mayor dificultad para erradicarlas está en que sus huevos puedan alojarse en pequeños lugares del entorno donde se desenvuelve la mascota y volver a infestarla cuando eclosionan. Por ello, también se hace necesario fumigar dicho entorno".
Montero añade que, en el caso de las garrapatas, "pueden producir anemias agudas si están en gran número, como también en que pueden transmitir enfermedades graves, ya que es posible que transmitan desde virus a bacterias".
Para luchar contra este parásito sostiene que, además de un repelente, es clave que los dueños revisen con frecuencia el pelaje de la mascota, especialmente después de cada paseo.