Las picadas más sabrosas están a metros de la casa
Familias de Concepción, San Pedro de la Paz y Hualpén ostentan negocios que se caracterizan por su sabor, contundencia y también los mejores precios.
Se han transformado en lugares "salvadores". Aquellos a los que más de algún vecino recurre cuando no hay almuerzo o cuando las ganas de darse un "gustito" afloran en mitad de la noche. Se tratan de las picadas de barrio, esas que por sus sabores, precios y, por sobre todo, el cariño con que están confeccionadas, se han ganado los estómagos en sus sectores.
Reconocidos afuera
Fama internacional tiene El Sambolito (Reconquista 4026) de Hualpén. Así lo cuenta Mario Martínez, dueño del lugar, quien junto a su señora se instalaron hace nueve años en una de las principales arterias de la comuna con su negocio de sándwiches, pichangas y completos, entre otros. Pero son los primeros los que más se llevan, sobre todo por su tamaño: 22 centímetros, además de la rapidez en la entrega del producto, menos de 5 minutos.
"Un matrimonio chileno-cubano puso el local, pero no les gustó. Al tiempo me ofrecieron quedarme con el negocio. Así nació El Sambolito, que es una jerga militar. Adentro se dice vamos a comernos un sambolo, pero sonaba muy feo, así que le pusimos así. El diminutivo sonaba más cariñoso", relata a La Estrella.
También destaca que su local es conocido en países como Estados Unidos, Argentina y Ecuador. "Tengo clientes que son de allá, incluso han llevado para sus países. Tengo un capitán de Ecuador que estuvo acá", dice, mientras muestra un recuerdo que éste último le dejó. Además de personas de otras regiones.
El Sambolito está abierto de martes a sábado, desde las 16 a 12.30 horas
Pura calidad
Siguiendo en Hualpén, Carlos Lagos y su señora Patricia Rioseco tienen La Carreta, nombre que según cuentan sus dueños les recuerda su origen. "Somos de Chillán, de Coihueco, y ahí teníamos un amigo que tenía una peña-discoteque La Carreta. Es un homenaje. Además, me gusta recolectar cosas antiguas campestres".
En el lugar, ubicado en avenida Alemania con Corintios, los vecinos del sector pueden degustar papas fritas, completos, sándwiches, pichangas, chorrillanas y empanadas, entre otros manjares. "Partí con un negocio de frutas y verduras. Era como un minimarkert y ahí se me ocurrió hacer algo con comida. Así nace La Carreta", dice.
"Acá me preocupo por el tema de la calidad. Trabajo con carnes nacionales de primer nivel. Mis sándwiches son bien contundentes. Además, las empanadas son bien famosas por acá", agrega.
El local abre de martes a domingo, desde las 12 a 12 horas. "Siempre nos hemos destacado por las pichangas, que yo hice un invento; también chorrillanas que son una delicia. Nos preocupamos de cada detalle", señala.
Las tres "b"
Vender barato y de buena calidad es parte de los objetivos de "Donde Marito", picada ubicada en Orompello, casi al llegar a Bulnes, en Concepción. Dos completos italianos o alemanes por mil pesos o sándwiches a mil 400, son parte de los productos que acá se comercializan.
Mario Merino Cerda, dueño del lugar, cuenta que la picada nació hace tres años y sólo era el comedor, muy pequeño. "Nos iniciamos vendiendo 30 completos, desde el principio con la promoción, y se fueron en una hora. Al otro día sumamos 30 más, que vendimos en el mismo tiempo. "Empezamos a formalizar e innovar el tema, porque nos dimos cuenta que era 'cumbia' como le dicen los cabros hoy… con el tiempo fue aumentando y aumentando. Se dio la oportunidad después de tener este espacio y seguir ampliándonos. Gracias a Dios ha sido súper popular. Aparte, el producto es bueno y el valor también. Tiene tan buena rotación, que los productos siempre están frescos. Es imposible que alguien diga que está añejo", destaca.
El lugar no sólo es visitado por estudiantes, sino que por vecinos y gente que ha oído de la picada. Asimismo, "no vendemos ni alcohol ni cigarrillos, por eso viene harta familia. El nombre se transforma en algo colectivo…'El Marito', que quizás ni sepan quién es", apunta sobre su negocio, en el que trabajan también su esposa e hijos.
El lomo es el secreto
Partió lento, pero en pocos meses, "Lomo Alemán" se ha transformado en una picada imperdible para quienes transitan por la Ruta 160, específicamente en el sector de Lomas Coloradas. Acá, Francisco Gutiérrez y su socio Gonzalo Monárdez, montaron un lugar donde el lomo ahumado es el rey.
"Abrimos el 2013. Al principio vendíamos 10 a 15 sándwiches diarios. Sabíamos que lo que teníamos era bueno. Toda la gente que llegaba se repetía. Todos los días venían las mismas personas. Pero en diciembre explotó todo. Me compré un auto y empezamos el reparto. Comenzamos a vender 100 sándwiches al día. Fue un cambio importante. La gente llamaba y llamaba, toda la gente quería más y más. Empezamos a contratar más gente, en un año estuvo creciendo", relata Gutiérrez, quien cuenta que la versión Torre es su sello.
Así se fueron agrandando, contando hoy con una sucursal en Andalué. "Nosotros apostamos a mantener la calidad y el sabor", sentencia uno de los dueños de la picada, que abre de lunes a domingo, en horarios de 13.00 a 1.00 horas, mientras los fines de semanas se alarga hasta las 3.00.
"Las empanadas son bien famosas por acá en La Carreta"
Carlos Lagos,, dueño de La Carreta"
"Tengo clientes que son de allá (extranjero), incluso han llevado para sus países".
Mario Martínez,, dueño de "El Sambolito""