Los mutualistas que disfrutan de la buena mesa, cultura y rayuela
Los platos tradicionales, el deporte, el teatro y los asados se disfrutan día a día en calle Aníbal Pinto 1764. Con más de 100 años de historia, la Sociedad Mutualista de Carpinteros y Ebanistas, busca integrar a las nuevas generaciones.
Con 117 años recién cumplidos en mayo, la Sociedad Mutualista de Carpinteros y Ebanistas se consagra como la tercera más antigua de Concepción. Ayer, como hace más de un centenario, en el casino había una exquisita cazuela de cerdo con chuchoca, al más puro estilo casero. "Son como las comidas que te hacía la abuelita", concuerdan los comensales, que no dudan a donde dirigirse a la hora de almuerzo.
Además, los mutualistas inflan el pecho cuando hablan de la sociedad, que funciona como club de rayuela, casino, taller cultural y cuenta con espacios multiuso que están a disposición de todos los penquistas. Y claro, como sede social, que ha convocado a sus adherentes de manera sagrada hace más de un siglo, y esperan que las generaciones futuras continúen con el gran legado, que se caracteriza por la igualdad en el trato de todos los asistentes.
"Cuando pasamos la puerta de entrada, acá somos todos iguales, no hay diferencias, en ningún aspecto", asegura el actual presidente de la Sociedad Mutualista de Carpinteros y Ebanistas, Antonio Mella.
Historia viva
Entre la gente de mayor edad, la sociedad es bastante famosa, no solo por los 117 años de historia, sino que además porque han estado en el mismo lugar de siempre. Si bien antes tenía otro nombre (Club de Rayuela Plaza Unión de Carpinteros y Ebanistas), siempre ha permanecido en calle Aníbal Pinto.
"Esto partió por iniciativa de los carpinteros de principios de 1900. Fundamentalmente eran personas o familiares ligados a la carpintería, o a algún oficio, pero no eran profesionales. Después se fue expandiendo a todo público", detalla el presidente.
"Han pasado muchísimos socios, y de hecho les tenemos un homenaje a los más emblemáticos, a un costado de las canchas de rayuela", cuenta el popular Galo Orellana, con la guatita llena, luego de almorzar la exquisita cazuela casera.
De hecho, las canchas de rayuela suelen ser el centro de atención y una de las máximas atracciones de la sede. "La rayuela es la actividad más popular de los socios, es una de las grandes razones por la que existe la sociedad", explica Antonio, que llegó hace menos de una década a la sociedad, y hace cuatro que ya es presidente. "Primero entras como aspirante, apadrinado por algún socio, y estás así por seis meses. Luego juras, y a partir de ahí ya eres socio oficial", explica.
Sin embargo, no es la única atracción que hay en el lugar, ya que la comida casera hace dividir las opiniones a la hora de elegir lo más importante en este lugar. "Es todo exquisito, además que tienen platos distintos cada día, tienen que comer acá", recomienda el gran guaripola de los guachacas, Dióscoro Rojas, que fue por primera vez al lugar en 1979, y le sorprende cada día lo sabroso de la comida.
Otra característica que hace especial a este lugar son las cosas que hay en la sala de reuniones de la directiva. "Tenemos fotos antiguas, libros históricos, y también el registro de todos los socios, desde el primero", afirma el presidente. "De hecho, esta silla (ver foto) está desde 1905, y fue hecha por los socios carpinteros. No se ha tocado desde entonces, y los grabados son los originales", asegura.
Integración
Pese a disfrutar de excelente ambiente, buena comida, y un espacio amplio, los socios están un poco preocupados por la falta de gente joven interesada en adherirse a la sociedad. "En mayo fuimos parte del octavo congreso de mutualistas en Uruguay, a debatir temas con venezolanos, colombianos, ecuatorianos, argentinos, etc. Ahí uno de los temas que se trataron fue cómo incentivar la inclusión de gente joven a las sociedades, porque el 80% de nuestros socios, por ejemplo, son adultos mayores", lamenta Mella.
Una de las actividades que más llaman la atención de las nuevas generaciones son los espacios de cultura que se ejecutan en los salones multiuso. "La rama de cultura está constantemente funcionando, y ha logrado captar a varios jóvenes que bailan cueca, hacen teatro, o simplemente les gusta la cultura", cuenta Erwin Lagos, que es socio, músico y es el encargado de la rama de cultura.
"Prestamos los lugares y no cobramos, sino que pedimos una cooperación que queda a criterio de los que usan el espacio", añade el presidente.
"Se ha generado muy buena relación con los jóvenes, que son en su mayoría universitarios. De hecho, hoy (ayer) en la tarde tenemos una plateada para hacerles la bienvenida", comenta Lagos, que se hizo socio hace cinco años.
mujeres presente
"Otro de los temas que se trataron en Uruguay, fue la integración de las mujeres, porque estas sociedades son muy machistas", afirma Antonio Mella.
Los Carpinteros y Ebanistas llevan la vanguardia en el tema de la inclusión de la mujer, ya que en su club de rayuela tienen una rama femenina, de la cual Verónica Zurita es partícipe. "Hace poco tenemos la rama, pero hacemos solo actividades internas, jugamos entre nosotras, no competimos. Lo que pasa es que en otras agrupaciones aún no tienen ramas de mujeres", se lamenta.
"Nosotras nos preocupamos más de los enfermos, que son varios y necesitan mucha ayuda", declara Verónica.
Tanta es la preocupación por los que tienen problemas de salud que no pueden asistir a la sociedad, que los socios prestan las instalaciones para hacer más expedito el acceso a estos servicios, o para que directamente se atiendan.
"Ponemos un puesto del Cesfam para que los socios se acerquen a la sede a sacar números, por ejemplo", explica el presidente de la sociedad.
"Vienen algunos profesionales de la podología y kinesiología a ocupar los espacios para atender tanto a socios como a personas externas", cuenta Verónica, que está muy comprometida con la salud de los integrantes. "Todo eso, además de los talleres de yoga, taekwondo, plantas medicinales, teatro, música, etcétera", complementa.
Dentro de los mejores escenarios que esperan para el futuro entre los socios, está la inclusión de los estudiantes, que se hagan miembros y que participen de las actividades. "Ojalá vengan jóvenes y puedan estar otros 100 años, y quien sabe cuánto tiempo más", reconoce ilusionado Antonio Mella.
"La rayuela es la actividad más popular entre los socios mutualistas"
Antonio Mella,, presidente de la Sociedad"
117 años de existencia tiene la institución mutualista ubicada en Aníbal Pinto.
120 socios activos aproximadamente tiene hoy la Sociedad de Carpinteros y Ebanistas.