Repetidamente escucho a amigos que están cansados de su perro. "Mi perro está loco", me dicen, o "no para de ladrar", "se persigue la cola", "se lame mucho", "mis hijos ya le tienen susto porque cuando los ve se les tira encima" y un gran etcétera. Además, leo muchos mails de personas que tienen un perro y están cansadas porque éste ladra mucho, rompe cosas, no se conforma con sus juguetes y/o está alterado.

En Fundación Julieta, al menos el 40% de los mails diarios son de un dueño aburrido que quiere dar en adopción a su perro porque éste tiene comportamientos como los descritos. Y dejando de lado la impotencia que da leer algo así, gente que tan livianamente quiera regalar como un colchón a su perro porque éste no tiene el comportamiento esperado, resulta insólito que quienes deciden tener un animal en su casa no hagan lo que tienen que hacer cuando lo deciden tener ¿No leen? ¿No se informan antes de tomar esa gran decisión? Al parecer no, ya que hay quienes no debiesen tener jamás una mascota y, sin embargo, pueden llegar y comprar una sin ninguna traba de por medio.

Somos las organizaciones las que nos preocupamos de que quienes adoptan una mascota estén realmente informados de lo que esto significa, de los deberes y responsabilidades que están adquiriendo y de hacerles además seguimiento, porque a las tiendas de mascotas claramente les interesa sólo su negocio, que es vender.

Todas las conductas descritas al principio hablan de un perro estresado. Y el estrés se les produce por nuestra falta de compromiso con ellos. Es sólo y únicamente nuestra culpa. Porque usando el sentido común, si un perro está todo el día solo, y en la noche llegan sus dueños para con suerte alimentarlo, claro, ese perro solo, con falta de juego, de paseo y socialización va a estar estresado, lo que va a influir en su comportamiento.

Deben entender que los perros son seres sociales, no plantas para adornar nuestro jardín. Y el estrés muchas veces puede volverse agresividad también. Cuando en las noticias dicen que un perro atacó a una persona, si buscan un poco el contexto, todos suelen ser perros grandes que estaban en un patio ínfimo, donde nadie les hacía cariño, jugaba a tirarles la pelota, los paseaba o, en definitiva, los trataba como un perro necesita ser tratado. Entonces es fácil, para que nuestro perro no tenga el comportamiento de un loco como algunos dicen hay que hacer lo obvio, pasearlo al menos dos veces al día (en la mañana y en la tarde cuando llegamos de nuestro trabajo), tenerle juguetes para que tenga disponibles cuando está solo, hacerle cariño, suavizar un poco los límites y dejarlo entrar a la casa. En cuanto a los fines de semanas, incluirlo en las actividades de parque, trekking, playa y las que hagamos como familia.

Recuerden, ellos nos necesitan y mucho. Si no pueden darles lo mínimo, fácil, ¡no tengan un perro!.

"Deben entender que los perros son seres sociales, no plantas para adornar nuestro jardín. Y el estrés muchas veces puede volverse agresividad también""