Almacenero recibió escopetazo en la cara durante brutal asalto
Su familia vio todo a través de las cámaras de vigilancia del local. Piden que atrapen pronto a los culpables.
Con heridas de perdigón en su rostro y su hombro terminó un almacenero que fue víctima de un asalto, mientras atendía su negocio en Coronel. Uno de los tres delincuentes que entraron a su local, ubicado en el cerro Corcovado, le disparó a quemarropa con una escopeta hechiza.
Familia vio todo
Mientras los delincuentes atacaban al comerciante, su familia vio todo desde la casa, a través de las cámaras de vigilancia que tienen instaladas en el establecimiento. Valeria, su hija, relató a La Estrella que "puse atención a la pantalla cuando sentí unos gritos al lado, eran una especie de amenazas y ahí vi cómo le disparaban a mi papá. Cuando lo fuimos a ver, estaba todo ensangrentado y con mucho dolor. Nos decía que le dolía mucho".
El hecho se registró en la subida Santa Elena, a las 22.50 horas. La víctima, de 43 años, estaba guardando la plata que tenía en la caja porque, a esa hora, ya estaba a punto de cerrar. Fue ahí cuando tres sujetos ingresaron al inmueble. Dos de ellos lo rodearon pero quien cargaba el arma se le acercó de frente y le disparó a quemarropa. Los perdigones rompieron la vitrina y se incrustaron en la cara del comerciante.
"Todo ocurrió en unos quince segundos. Mi papá salió a pedir ayuda, mientras mi tata perseguía a los tipos. Los vecinos de al frente, que se dieron cuenta de todo, llevaron a mi papá al Hospital de Coronel", contó la hija del afectado. En el sector Corcovado, el hecho causó enorme conmoción y repudio entre los vecinos ya que el trabajador asaltado es conocido y querido, con más de veinte años de servicio en el barrio.
Valeria agregó que "se llevaron como tres mil pesos, que era lo que había quedado en la caja".
Papá los persiguió
Su abuelo y padre del afectado, indicó que "había sacado a pasear a mi perro un poco antes y me encontré con estos malditos mientras arrancaban del negocio. Siempre ando con un bastón retráctil y salí persiguiéndolos con eso, intenté darle a uno pero sólo logré romperle la ventana de atrás al auto".
El hombre añadió que "cuando vi hacia el local vi a mi hijo lleno de sangre pidiendo ayuda. Cuando lo miré sólo pensé que me habían matado a mi cabro. Se tocaba su pecho, su hombro, le dolía".
Hasta el cierre de esta edición, el comerciante se recuperaba favorablemente en el Hospital Regional de Concepción, luego de ser trasladado hasta dicho centro asistencial debido a la gravedad de sus lesiones.
Consultado por lo ocurrido, el capitán Oliver Urrea, de la Segunda Comisaría de Coronel, señaló que "efectivamente, personal de Carabineros concurrió al lugar tras recibir una denuncia por robo con violencia, en donde tres individuos, que llegaron al negocio en un auto rojo, intimidan y disparan a su dependiente. Sobre la base de esos antecedentes, se están realizando intensas diligencias para dar con el paradero de los involucrados. Para ello se encargó el vehículo, basándonos en sus características. Además, se está analizando la participación de estos sujetos en otros delitos, con la finalidad de conseguir su pronta captura".
Cabe señalar que, a los esfuerzos de Carabineros se sumó el trabajo de la Policía de Investigaciones de Coronel, quienes trabajaron con las imágenes de las cámaras de vigilancia. Todos los antecedentes fueron remitidos al Ministerio Público.
"Cuando lo vi sólo pensé que me habían matado a mi cabro".
Celzo, papá de la víctima"