Alfonso Levet G.
Veneno, trampas y hasta ahuyentadores de ultrasonido han tenido que comprar los vecinos del sector Miraflores de Concepción, ante el sostenido aumento de roedores que se meten a las casas en busca de alimento y refugio.
Los residentes aseguraron que las obras de construcción de edificios junto a la Costanera han favorecido la presencia de roedores en el sector. "Hacen excavaciones y los ratones se vienen corriendo para acá buscando dónde esconderse", dijo la presidenta de la Junta de Vecinos Miraflores, Marcela Donoso.
Varios habitantes históricos del sector coincidieron con el diagnóstico y acusaron también que los trabajos en 21 de Mayo también han provocado una migración de roedores.
"Tenemos una vecina que ha cazado a 18 ratones y otra familia capturó a 16", aseguró Donoso.
Aunque la municipalidad ha realizado operativos anti plagas con anterioridad, últimamente no han pasado por el lugar.
Una de las residentes afectadas por la plaga de roedores, María Yáñez, afirmó, además, que los venenos que reparte el personal municipal no les hace daño a los ratones, "es como tirarle bombones, porque sólo los hacen engordar, pero no los matan".
Por ello, la mayoría ha optado por comprar sus propios productos y trampas, e incluso algunos han adoptado gatos como mascotas, para evitar malos ratos. "De todas formas, apenas uno pilla un ratón hay que desinfectar todo en la casa, por la seguridad de uno y de los niños también", contó Marcela Donoso.
Además, entre calle Miraflores y Fray Juan Pérez hay un pasaje peatonal bajo el que corre un colector de aguas, el que, lamentablemente, permanece casi de manera constante lleno de basura, lo que dificulta el escurrimiento.
"Cuando llueve mucho esto se taponea y por ahí mismo empiezan a correr los ratones", afirmó la dirigenta vecinal.
Los vecinos piden una intervención considerable por parte de la municipalidad de Concepción, porque hasta ahora, dijeron, las medidas han sido insuficientes en controlar la plaga de ratones.
Respuesta
Pese a los intentos de La Estrella para obtener una respuesta de la muni penquista, no fue posible obtenerla y queda, por ahora, pendiente.J"
La voz de los vecinos
María Yáñez, dueña de casa
"Nosotros sacamos las tablas y cambiamos el piso, pero de todas formas pasan por el entretecho. Aunque sea uno solo, igual molesta".
Joaquina Lozano, comerciante
"Los trabajos en 21 de Mayo y la remoción de piedras en la Costanera han traído muchos ratones, nunca antes habíamos tenido lauchas".
Paola Hernández, residente
"Esto viene desde hace tiempo y es terrible. Atrás hay una canal y por ahí aparecen demasiados ratones, por el patio, por la cocina".
Cortes de luz
Otro problema que sigue sin solución son los continuos cortes de electricidad que afectan al alumbrado público del sector. Aunque los vecinos disponen de un número de emergencia de la municipalidad para avisar cuando ocurren los apagones, los afectados insisten en que la respuesta es muy lenta y, a veces, engorrosa. Los residentes aseguran que con las lluvias de los últimos días los cortes han sido más recurrentes que de costumbre.
550 casas hay en Miraflores. La mayoría ha sido afectada por ratones los últimos seis meses.