Es importante que los gastos de marzo no se transformen en una pesadilla para los padres, pues este rechazo se traspasa a los niños que asocian la cercanía de este mes a problemas económicos, en vez de considerarlo una oportunidad de aprendizaje que les favorecerá su desarrollo personal.
En algunos casos, las familias apuestan por solicitar un crédito de consumo para cubrir estos mayores desembolsos. Siendo esta la alternativa elegida, conviene considerar algunas recomendaciones:
-Evaluar el número de cuotas elegido. Cuando se pide un crédito de consumo, se está postergando el pago de un compromiso a varios meses, por lo que al definir el número de cuotas, es importante visualizar que otros compromisos existen para que no se junten cuotas de dos créditos.
Los bancos e instituciones financieras ofrecen en marzo una serie de promociones y créditos en montos y números de cuotas ya establecidos. Sin embargo, no siempre estos montos son los que se ajustan a la necesidad de quien debe endeudarse.
Por último, y aunque parezca repetitivo, hay que cotizar y comparar, no sólo la tasa de interés, sino que el valor cuota y CAE que termina pagando el cliente. En algunos casos, se producen grandes diferencias principalmente por los gastos operacionales de determinados créditos y los costos, por ejemplos, en seguros asociados.
Columna